Putin acusa a EE. UU. de interferir en sus asuntos antes de que Trump fuera presidente

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, se ha desvinculado por completo de las acusaciones de manipulación electoral durante los comicios estadounidenses, culpado a la candidata demócrata, Hillary Clinton, de cometer errores de campaña "que no quiere reconocer" y que le costaron la derrota frente a la "más eficaz" propuesta de su rival y vencedor, Donald Trump, y por último ha señalado que Estados Unidos llevaba años "interfiriendo sistemáticamente" en los asuntos del Kremlin antes de que todo esto ocurriera.

"Todo esto no es más que cotilleo, y además dañino. No hay ni rastro de huellas rusas en este presunto ataque informático", ha declarado el mandatario ruso, quien igualmente negó que hubiera discutido con el equipo de campaña de Trump el levantamiento de las sanciones contra Rusia antes de las elecciones.

"Hay que simplemente poner fin a esta charla inútil y maligna", afirmó, porque "perjudica tanto las relaciones internacionales como la economía global, las cuestiones de seguridad y la lucha contra el terrorismo".

"He leído estos informes, no tienen datos concretos, se forman solo de hipótesis y conclusiones tiradas de suposiciones", dijo al precisar que mientras falten pruebas no hay nada de lo que discutir.

"Es un sinsentido", ha aseverado el presidente Putin en declaraciones en el Foro Económico Internacional en San Petersburgo, donde no obstante ha confesado su preocupación ante lo que considera como el avance de la infraestructura militar de la OTAN, que describió como el brazo militar internacional de Estados Unidos, cada vez más cerca de sus fronteras.

No solo eso: a juicio de Putin la relación entre Rusia y la OTAN es muy débil por "la ausencia de mecanismos de coordinación entre ambos bloques". "Y eso es malo a la hora de luchar contra el terrorismo, porque la única forma de resolver este problema es a través de la actuación conjunta", ha añadido en declaraciones recogidas por la agencia oficial de noticias rusa, RIA Novosti.

Normalización de las relaciones

El mandatario tampoco se anduvo con contemplaciones a la hora de describir el actual estado de relaciones con EE. UU., que atraviesa "el punto más bajo desde la guerra fría", pero ha estimado que todavía hay una oportunidad de salvación: el levantamiento de las sanciones a Rusia, para que los empresarios estadounidenses puedan entablar relaciones económicas con compañías rusas.

"Ayúdennos a restablecer un diálogo político normal (...) Pido en nombre de Rusia: ayuden al jefe de la nueva administración, al presidente de EE. UU.", ha pedido Putin a los empresarios norteamericanos, tras denunciar que "los cimientos de la cooperación entre Rusia y EE. UU. han quedado prácticamente destruidos en los últimos años".