Las fuerzas iraquíes avanzan en el este de Mosul, pese al mal tiempo

Las tropas se hicieron con el control del barrio de Al Kafaat II, en el noreste de la ciudad.

Las fuerzas especiales iraquíes junto a la Universidad de Mosul.
Las Fuerzas Especiales Iraquíes junto a la Universidad de Mosul.
Reuters

Las fuerzas iraquíes siguieron avanzando en el este de la ciudad de Mosul (norte), a pesar del mal tiempo que ha ralentizado las operaciones militares contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), en su último bastión urbano de Irak.


Las tropas se hicieron este domingo con el control del barrio de Al Kafaat II, en el noreste de Mosul, informó el comandante de las Operaciones Conjuntas, general Abdelamir Yaralá, en un comunicado. Las unidades castrenses izaron la bandera iraquí en lo alto de los edificios, como han hecho en cada uno de los barrios orientales en los pasados quince días.


Desde el 29 de diciembre pasado, la operación para expulsar al EI de Mosul ha recobrado fuerza y las fuerzas gubernamentales han avanzado más rápido y con más precisión, y ya controlan el 90 % de la mitad oriental de la urbe.


Por otra parte, Yaralá informó de que las Fuerzas Antiterroristas lograron este domingo irrumpir en el barrio de Al Andalus, en el noreste de Mosul, próxima al campus universitario, que fue conquistado el sábado por esas unidades, que cuentan con el apoyo de la coalición internacional comandada por Estados Unidos. No obstante, los enfrentamientos continúan en ese distrito, que es uno de los pocos que aún quedan en manos de los extremistas en el sector este, ubicado en la orilla oriental del río Tigris.


A pesar de la lluvia y la niebla que cubrieron los cielos de Mosul, el comandante aseguró que los uniformados iraquíes continúan avanzando en el este de manera rápida gracias a la nueva estrategia y al asesoramiento militar. Una mejor planificación y coordinación han permitido a las fuerzas iraquíes, especialmente las Antiterroristas, hacerse con varios barrios esta semana, incluida la importante universidad, la segunda más grande del país.


Después de haber tomado el control total del campus este sábado, las fuerzas especiales prosiguieron sus operaciones para eliminar los últimos focos de resistencia y abatieron a treinta yihadistas, entre ellos dos francotiradores y dos terroristas suicidas. Los francotiradores son la principal arma de los radicales en las zonas donde hay edificios elevados, por lo que las tropas iraquíes deben avanzar con mucho cuidado, mientras que en los espacios más abiertos y en las calles principales, los coches bomba son la amenaza más mortífera.


Un oficial de las Fuerzas Antiterroristas, Ali al Hadizi, informó que las unidades especiales están "limpiando" el complejo educativo de bombas de fabricación casera y registrando todos los edificios que componen el campus, de los cuales hay explosivos colocados. La Universidad de Mosul no servía como centro de enseñanza desde que el EI irrumpió en la ciudad y la dominó, en junio de 2014, sino que era empleada por los yihadistas como laboratorio y almacén de armamento.


El general Taleb al Kinani, comandante de las Fuerzas Antiterroristas iraquíes, destacó el sábado la importancia simbólica de la reconquista de la universidad como "centro cultural y de civilización", y no sólo en Mosul, sino en "todo Irak y el mundo". Sin embargo, las tropas aún tienen que recuperar otro importante lugar del legado histórico y cultural iraquí, que son las ruinas de la ciudad de Nínive, ubicadas al sur del complejo educativo.


Las tropas las han rodeado en los pasados días, por el sur, por el norte y por el este, pero aún no se han hecho con el control de este sitio arqueológico, en el que hay restos de la civilización asiria. Mientras, en los barrios del este de Mosul que han sido recuperados recientemente, los habitantes intentan regresar a la normalidad, en medio de coches carbonizados, edificios bombardeados y calles completamente destrozadas.


Los servicios básicos aún no están disponibles, no hay agua corriente ni luz, y tardarán en ser restablecidos porque el tendido eléctrico está caído y las tuberías y alcantarillado, rotos. Parece que un tifón ha barrido los barrios que han sido escenario de combates hasta hace pocos días, pero la actividad regresa tímidamente a las calles, con algunas tiendas que abren sus puertas para vender lo poco que llega hasta el interior de Mosul.


Una frutería y un taller de coches, un puesto improvisado que vende varias docenas de huevos y una tienda que ofrece ropa polvorienta indican las ganas de los habitantes de Mosul de regresar a la vida y dejar atrás la guerra.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión