El Ejército israelí atacó la noche del sábado una posición de Hamás en Gaza, en respuesta a los disparos dirigidos desde el interior de la Franja palestina contra algunas de sus tropas apostadas en el norte de la frontera.

Según confirmó una portavoz militar israelí, las fuerzas armadas dispararon fuego de tanque contra un lugar vinculado al grupo islamista, que gobierna el enclave costero, y aseguró que no se habían producido ni víctimas ni daños en el lado israelí, sin ofrecer datos de la zona palestina.

En agosto de 2014 Israel y Hamás alcanzaron un alto el fuego que puso fin a 50 días de enfrentamientos en los que murieron 2.251 palestinos, dos tercios de ellos civiles, y 73 israelíes, en su gran mayoría soldados.

Desde entonces, Hamás ha mantenido a raya a sus milicianos y los de otros grupos armados y la tregua se ha respetado en gran medida, con ocasionales violaciones, que el Ejército israelí responde con bombardeos y ataques a instalaciones militares en Gaza.

La última fue hace dos semanas, cuando milicianos salafistas lanzaron un cohete que impactó en el área residencial de Sderot sin causar víctimas, una agresión que fue respondida por Israel con el bombardeo de decenas de objetivos militares de Hamás, la Yihad Islámica y el Frente Popular.

Israel hace responsable a Hamás de las agresiones contra su territorio que provienen de la Franja.