Un total de 84 fallecen arrolladas en Niza tras un atentado

La cifra oficial de muertos en el atentado que sufrió este jueves por la noche la ciudad francesa de Niza asciende a 84. Decenas de heridos continúan hospitalizados, varios de ellos en estado crítico. El terrorista, que sembró el pánico atropellando a la gente con un camión mientras disparaba indiscriminadamente, eligió el conocido Paseo de los Ingleses de la ciudad de la Costa Azul justo en el día de la Fiesta Nacional francesa.

Testimonios de una trágica noche en Niza

Los que salieron ilesos de la masacre han recordado los duros momentos vividos este jueves por la noche. “Cuando me di cuenta que su objetivo era matar a la gente fue muy difícil de procesar, pero había que salir de ahí” cuenta Alba, una de las españolas que estaba en el Paseo de los Franceses cuando el terrorista comenzó a embestir a los ciudadanos con un camión.

Mohamed Lahouaiej Bouhlel lo tenía todo planeado

?Mohamed Lahouaiej Bouhlel, 31 años, tunecino, vivía en Niza y era repartidor de profesión. De ahi su habilidad para 'zigzaguear' con el camión con el que arrolló a la multitud durante dos kilómetros. Tenía todo perfectamente planeado. El camión lo alquiló el lunes y debía devolverlo el miércoles. Pero ese día lo dejó aparcado en el barrio Oriol en el este de la ciudad, hasta este jueves. Pasadas las 21.30 de la noche una cámara de seguridad le graba llegando en una bici, que guarda en la parte trasera, y se marcha. Se le pierde la pista durante una hora. A las diez y media otra cámara le sitúa circulando por el Barrio Magnan, en el oeste, antes de perpetrar el ataque. Boulhel era un desconocido para los servicios de inteligencia. Nunca mostró signos de radicalización pero el Fiscal de París, que dirige la investigación, no descarta el vínculo yihadista. Sin embargo si había sido detenido varias veces por robo, amenazas y maltrato. Incluso fue condenado en marzo a seis meses de cárcel por violencia con armas, pero no ingresó en prisión. 

Las autoridades francesas entran en el piso del atacante de Niza

Los forenses buscan cualquier indicio que explique el ataque. Protegen de los curiosos el camión. En él encuentran una pistola automática, con la que pudo disparar antes de ser abatido. Además, una granada, otra pistola, y dos rifles falsos. La tarjeta de crédito y su permiso de conducir, datos que llevan a la policía hasta su casa. Vecinas que pensaban que era un hombre raro, pero miran su buzón sin poder creérselo. Es él. Mohamed Lahouaiej, 31 años, tunecido. Vivía solo, divorciado, tres hijos. Y aquí se quedan.

Los vecinos del terrorista de Niza dicen que era reservado y huraño

Tras el registro policial, por la mirilla se puede ver desorden, y cajas de medicamentos. Jamás daba los buenos días, cuenta una vecina. Llevaba año y medio viviendo solo tras separarse de su mujer, que también ha sido interrogada, con la que tenía tres hijos. Hoy en su puerta, un ciudadano tunecino ha condenado el ataque. Como suele pasar, nadie sospechó nunca nada más allá de que era un hombre complicado en un momento complicado. Dicen que bebía, sospechan que también se drogaba. Sus vecinos nos dicen que están impactados. El autor era vecino de este barrio con mucha presencia musulmana lejos de la Niza del glamour, el barrio de Les Abbatoirs, 'el matadero'.

Los líderes mundiales muestran su apoyo a Francia

Los líderes mundiales han querido mostrar sus condolencias a Francia por el ataque terrorista. Angela Merkel o Donald Trump, entre otros muchos, han mostrado su solidaridad con el país galo. Las banderas de muchas ciudades ondean a media asta en señal de luto.

El paseo de los Ingleses se llena de flores y mensajes 

Menos de 24 horas después del atentado, el paseo de los ingleses se vuelve a llenar. Llegan ellos, cargados de flores y palabras de ánimo. Un recuerdo para hacer menos amargo el escenario donde este jueves por la noche 84 personas perdieron la vida. Una larga noche que no ha terminado todavía para muchos. Son los familiares de los heridos conteniendo la respiración, pegados al teléfono a la espera de cualquier buena noticia. El presidente, François Hollande, ha advertido: "52 de ellos se debaten entre la vida y la muerte".