​De superviviente a superviviente: el mar nos dio una segunda oportunidad

"?Nadie se abandona a sí mismo, nadie quiere dejarse morir y en una situación así las ganas por vivir son las que te alimentan día y noche".

Los españoles desaparecidos en Malasia han sido rescatados con vida.
Los españoles desaparecidos en Malasia han sido rescatados con vida.

No puedo imaginar por lo que han debido de pasar Marta y David, pero sí lo hago. Lo mismo ocurre con la indescriptible alegría que sentirán ahora sus familiares y amigos. O su valentía tras haber mirado a la muerte con los ojos y darle la espalda. Pero seguirán adelante, como yo también lo hice.


Fue la madrugada del 16 de agosto de 2014 cuando el barco turístico en el que viajábamos 25 personas naufragó en Indonesia debido a las negligencias e imprudencias de una tripulación inexperta y una embarcación sin ninguna medida de seguridad. Por delante, 22 horas, las peores de mi vida, olvidado y desconcertado en alta mar, junto a mi mujer, María Pallol. Un detalle que no puedo pasar por alto, porque fue ella la clave de mi supervivencia.


No conozco a Marta y David pero seguro que el hecho de haber pasado una experiencia de tal magnitud en compañía de tu pareja les habrá ayudado, y me atrevo a decir que mucho. Durante las 14 horas que permanecimos inmóviles siempre buscaba a María, pero más aún cuando tomamos la decisión de nadar en solitario hasta una isla desierta. Todo o nada. Así de simple era la ecuación. Así de dura.


Todavía no dejo de sorprenderme cuando muchas personas me plantean que ellos no habrían podido sobrevivir, que les pasa algo similar y se hubieran muerto. Error. Nadie se abandona a sí mismo, nadie quiere dejarse morir y en una situación así las ganas por vivir son las que te alimentan día y noche. Ellos y nosotros somos jóvenes con una larga vida por delante, con una familia y con unos amigos detrás; había motivos para creer. Y ellos y nosotros creímos.


Atrás queda la larga agonía. Nosotros, 22 horas en el agua, ellos, 10 días a la deriva en el mar. Los números aquí no importan, sino el escenario, la inmensidad del océano. Nadie quiere rodar allí y más si el protagonista eres tú. Pero si te toca, hay que afrontarlo con energía y decisión, no hay que dudar, aunque parezca inevitable caer en ello.


María y yo no lo hicimos cuando arrancamos a nadar solos. Ocho horas después, unos pescadores nos rescataron cuando nos quedaba menos de una milla para llegar a la isla. Era noche cerrada. La providencia ha querido que también hayan sido unos pescadores los que hayan rescatado a Marta y David.


No se puede describir con palabras un momento así, tampoco se quiere puesto que es algo íntimo, es tu momento. No hay muchos así en la vida, pero el nacimiento de mi hija es el otro. Siempre digo que ella vino del mar, fue el premio de nuestra supervivencia.


Y no quiero pensar que fue una casualidad, pero precisamente la barca de Marta y David tampoco reunía, como mi embarcación, ninguna mínima medida de seguridad. Ni radio ni GPS ni balizas ni bengalas. Nada para poder avisar en caso de una emergencia. De esta forma, ellos y nosotros nos habríamos ahorrado el horror de protagonizar una tragedia, de formar parte de una película en la que nadie nos contrató.


Pero desgraciadamente es así. Siempre he defendido que Malasia es mejor país que Indonesia, más seguro y con mejores infraestructuras turísticas. De hecho, María y yo estuvimos allí durante un mes en 2013, pero ahora veo que no. Lo digo porque era evitable, con una llamada por radio o un GPS, pero parece ser que en esas latitudes no es una opción, pese a que la vida de las personas sí lo sea.


Ahora, me alegro de escribir estas líneas. De superviviente a superviviente, como así querían sus familiares. Ya dije que no nos conocemos, pero ahora compartimos experiencias, y como ellos, todos tenemos dos cumpleaños, más motivos para celebrar.


Estaba en una cobertura informativa cuando he recibido el mensaje de Begoña, amiga de Marta: "¡Han aparecido, Rafa, a la fiesta os venís!". Será un placer, allí estaremos.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión