Críticas en la Unión Europea por la poca ambición ante las tragedias en el Mediterráneo

Los jefes de Gobierno pactaron triplicar el presupuesto de la vigilancia marítima.

Las críticas se han sucedido en los días posteriores a la cumbre europea dedicada a la migración por la poca ambición mostrada por los países de la Unión Europea (UE) ante las tragedias vividas en el Mediterráneo, según el Parlamento Europeo, representantes de la sociedad civil e incluso líderes comunitarios.


Los jefes de Estado y de Gobierno pactaron este jueves triplicar el presupuesto de la operaciones de vigilancia marítima "Tritón" y "Poseidón" este año y en 2016, anunciaron el envío de recursos para patrullar las costas y abrieron la posibilidad de estudiar un "primer proyecto piloto voluntario" sobre reasentamiento.


Sin embargo, los grupos políticos de la Eurocámara lo consideran insuficiente y han cargado contra los líderes europeos por no ir más allá, hacia una reforma de la política migratoria que facilite la entrada legal de los inmigrantes y el reparto de los demandantes de asilo, entre otras cuestiones.


"La falta de una verdadera política europea de asilo y migración está convirtiendo el Mediterráneo en un cementerio", advirtió el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, a los líderes en la cumbre.


La cuestión será tratada este miércoles en la sesión plenaria del Parlamento, hasta donde se desplazará el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, para informar de los resultados de la cumbre.


El propio Juncker mostró públicamente su disconformidad con el compromiso alcanzado por los Veintiocho.


"Me hubiera gustado que desde este momento hubiéramos sido más ambiciosos", dijo en la rueda de prensa celebrada al término del encuentro. "No ha podido ser posible, pero las conclusiones nos permiten continuar nuestra reflexión", añadió.


Juncker se refirió a la creación de cuotas por países de reasentamiento, "un punto que he mencionado pero que no ha sido tomado" por los líderes, dijo.


La Comisión está trabajando sobre una nueva agenda europea sobre la migración que prevé presentar el próximo 13 de mayo y Juncker advirtió de que pretende ir más allá de la vigilancia de las fronteras comunitarias.


En concreto, mencionó la importancia de "una propuesta en materia de migración legal porque, contrariamente a lo que se piensa, el problema no encontrará una solución si nos ocupamos exclusivamente de la inmigración ilegal".


En esta línea se pronunció también el presidente de la Alianza de Liberales y Demócratas Europeos (ALDE), Guy Verhofstadt, quien lamentó que "de nuevo nos hemos quedado en el mínimo común denominador".


"Todo el mundo en la sala sabía que triplicar el presupuesto de Triton no prevendría nuevos desastres, no se hace nada respecto a las causas de estas crisis", dijo Verhofstadt, quien pidió revisar el sistema de asilo europeo y crear visados por razones humanitarias y permisos migratorios similares a la "green card" de Estados Unidos.


El presidente del Partido Popular Europeo (PPE), Manfred Weber, abogó por dejar de lado las "declaraciones vacías" y pidió un "mecanismo de solidaridad de obligado cumplimiento para los solicitantes de asilo" con el establecimiento de cuotas por países, a la vez que se refuerzan "rápidamente" las misiones de rescate, entre otras medidas.


Por su parte, el presidente del Grupo Socialista en el Parlamento Europeo (S&D), Gianni Pittella, saludó que los líderes tomaran "algunos pasos concretos", pero recalcó que "queda por ver si los Veintiocho pasarán de las meras palabras a la acción".


"No podemos esconder nuestra preocupación y decepción respecto al persistente egoísmo político cortoplacista respecto al reparto de las cargas de la gestión de la migración y ante la falta de una visión sobre los aspectos humanitarios y a los derechos humanos" de la migración, apuntó Pittella.


La presidenta de la Izquierda Unitaria, Gabi Zimmer, reprochó a los países su "vergonzosa actitud" y que se centren en "defender las fronteras" en lugar en rescatar a los inmigrantes y refugiados, y pidió que se expanda el área más allá de las actuales 30 millas náuticas de la costa europea.


Zimmer recalcó que la Eurocámara "debe bloquear cualquier presupuesto europeo que no incluya un programa" de rescate, una idea también mencionada por Los Verdes, que pedirán al resto de los grupos que se unan para "poner presión" en este sentido.


Desde la sociedad civil, las voces se han sucedido para lamentar el resultado de la cumbre europea y pedir soluciones concretas a cuestiones como el reasentamiento, desarrollo de los países de origen, acceso legal para inmigrantes o refuerzo de las operaciones de salvamento.


"Drama", "tragedia", "insuficiente" son algunas de las palabras utilizadas por organizaciones como Oxfam, La Liga por los Derechos del Hombre o el Institut de Drets Humans de Catalunya en sus reacciones tras conocer el resultado de la cumbre.


"Se podrían haber acordado soluciones reales. Pero nadie debe ser engañado: no lo han sido", dijo Iverna McGowan, directora de la oficina de Bruselas de Amnistía Internacional.