El ​Papa tiende su primer puente internacional con el deshielo entre EE. UU. y Cuba

Los intentos del papa de contribuir a arreglar graves problemas internacionales no son novedad.

El Papa celebra su cumpleaños
El ​Papa tiende su primer puente internacional con el deshielo entre EE. UU. y Cuba
Efe

El papa Francisco ha tendido un decisivo puente de comunicación internacional en un conflicto enquistado, el del enfrentamiento entre Cuba y EE. UU., en línea con otros esfuerzos que han caracterizado su todavía breve papado.


Aunque los intentos del papa argentino de contribuir a arreglar graves problemas internacionales no son novedad -ahí está la reunión entre palestinos e israelíes de la que fue anfitrión en los Jardines Vaticanos el pasado junio-, al papa se le resistía todavía un gran avance en sus cerca de dos años de pontificado.

Como el que este miércoles quedó desvelado con la mediación confirmada del Vaticano en el restablecimiento de relaciones entre Washington y La Habana, que, a falta de la evolución de su aplicación práctica, ya se puede calificar como histórica.


Meses de discreta diplomacia vaticana -que como mandan los cánones en casos como este se sirvió de un tercer Estado, Canadá- han podido darle a Jorge Bergoglio un reconocimiento justo en el día en que el pontífice cumplía los 78 años.


El papa Francisco se limitó tras conocerse la noticia a decir que "se complace vivamente" por ese anuncio del restablecimiento de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, "con el fin de superar, por el interés de los respectivos ciudadanos, las dificultades que han marcado su historia", dijo su portavoz, Federico Lombardi.


Todavía queda efectivamente, como agregó el portavoz, que los mandatarios cubano y estadounidense se pongan a resolver las "cuestiones humanitarias de común interés, como la situación de algunos detenidos, para dar inicio a una nueva fase de las relaciones entre las dos partes".


Pero la primera piedra de este puente de unión que coloca el Vaticano -por algo al papa se le llama "pontífice", un término procedente del Imperio Romano que alude al funcionario que vigilaba la estructura que permitía salvar el río Tíber- tiene nombre de papa latinoamericano.


No puede quedar seguramente de lado esta circunstancia: la procedencia de Bergoglio, el primer papa latinoamericano, además entra en un particular libro de récords por comenzar a resolver un asunto que estuvo nada menos que en el origen de la división del mundo en bloques y que condujo a la "guerra fría" entre las dos potencias hegemónicas a mitad del siglo XX.


Cuando recientemente se dio el nombre de este papa en una hipotética "quiniela" de posibles candidatos al premio Nobel de la Paz entre los corresponsales de prensa en el Vaticano circuló el comentario de que a Francisco, por muy loables que hubieran sido sus aproximaciones a la resolución de conflictos, le faltaba "rematar" un trabajo.


Y es que, a pesar de su empeño por emparejar reformas internas de la Iglesia católica con mediaciones como la muy evidente de acabar con el conflicto en Oriente Medio, ese "remate" no ha llegado hasta este miércoles.


Aunque el gobierno de su iglesia sea la función más ampliamente aceptada como propia de un papa, no es ajena a este tampoco quedarse involucrado en asuntos del mundo y Bergoglio este miércoles dio una señal de que su pontificado mira hacia adentro, pero también hacia afuera.


Se pudo ver por ejemplo en su reciente viaje a Turquía, donde puso el acento en la tensión terrorista que mata a fieles cristianos y aleja a los musulmanes de las bases de su fe, en una alusión directa a que la comunidad internacional actúe de modo más decisivo en el conflicto creado por la aparición del Estado Islámico.

Otros puentes, sin embargo, todavía pendientes de tender se le plantean a Bergoglio, como se pudo ver el pasado fin de semana en relación con la visita que hizo a Roma el Dalai Lama, a quien el papa no recibió para evitar, según reconocieron ambas partes, un enfrentamiento con China, donde el pontífice tiene un reto casi tan histórico como el que se comienza a resolver en el Caribe.