Miles de belgas despiden a la reina Fabiola en Bruselas

La reina española de los belgas fallecía el pasado viernes en su residencia.

Restos mortales de la reina Fabiola
Miles de belgas despiden a la reina Fabiola en Bruselas

Miles de personas dieron su último adiós a la reina Fabiola de los belgas, cuyos restos fueron expuestos en el salón principal del palacio de Bruselas con un traje blanco, el mismo color que eligió en los funerales de su esposo, el rey Balduino hace más de veinte años.


Desde que al mediodía de este miércoles se abriera la capilla ardiente de la reina española de los belgas, miles de personas, de todas las edades, y entre ellos muchos españoles que llegaron a Bélgica en los años sesenta, como la propia Fabiola, han desfilado para rendirle homenaje.


Rodeada de coronas de flores blancas, Fabiola de Mora y Aragón descansaba con un rosario en sus manos entrelazadas, y la imagen de la Virgen María y el Niño Jesús en la cabecera.


Otra imagen de la reina y el rey Balduino en su juventud, también podía verse en la sala.


Muchos ciudadanos plasmaron sus palabras de despedida en los dos libros que la Casa Real belga guardará en honor a una reina cuya cercanía con los ciudadanos era ensalzada por todos los que hacían cola para darle su adiós junto a las verjas de palacio real de Bruselas, donde al mediodía el sol daba tregua al frío de los últimos días.


Entre ellos Marisa, una asturiana de 85 años que llegó hace 51 años a Bélgica y que hoy no ha dudado en tomar hasta tres autobuses ella sola para ver por primera vez a una mujer con la que dijo se sintió siempre identificada por ser también una belga de adopción.


"Es el primer día que conozco a Fabiola pero me ha llegado al alma. Me ha hecho llorar, parece una muñequita", dijo emocionada la asturiana. "A la reina no la he conocido hasta hoy pero ha sido un cielo, reina de verdad, sin orgullo, con una sencillez para todo el mundo. Ha sido una brava señora, una brava reina (...) Siempre me ha agradado, muy sencilla, muy educada, ha enseñado muy bien al rey que está. Los ha enseñado Fabiola", agregó.


Otra española, Emilia, una aragonesa que se encontraba de visita en Bruselas, destacaba tras abandonar la capilla ardiente "el respeto que la gente ha mostrado" a Fabiola.


"Era una reina admirada y nosotros, como españoles, hemos aprovechado nuestra visita a Bruselas para hacerle un homenaje y decirle adiós a una reina que aquí ha sido belga pero es española", explicó.


También la joven María, acompañada por su marido belga, aprovechaba la hora de comer en su trabajo para despedirse de la esposa del rey Balduino (1930-1993).


"Vengo a rendir homenaje a la reina Fabiola también en nombre de unas amigas cuya abuela era amiga íntima de ella. Le guardan un recuerdo inolvidable y yo también. Ha sido una persona muy íntegra y por eso mi marido y yo venimos a despedirnos y a rezar por ella", explicaba.


Con una tarjeta y flores también esperaba para decir adiós Jaqueline, una belga que ha sido de las primeras en situarse en la cola para ver a la Fabiola por última vez.


"Descansa amiga Fabiola, en paz y amor, de corazón te digo gracias", dijo contenta de hablar con la prensa española.


También de otros lugares de Bélgica, como de Amberes (Flandes, noroeste del país) llegaban admiradores de la reina, como Monique, que destacaba las "profundas convicciones religiosas" de Fabiola y su huella en la casa real belga.

"Fue una persona con carisma, ha renovado la monarquía, es una gran dama, los españoles deben estar felices por lo que los belgas dicen sobre la reina Fabiola"..


El Parlamento belga celebrará una sesión solemne en honor a Fabiola este jueves, en la que el viceprimer ministro Kris Peeters sustituirá al jefe de Gobierno, Charles Michel, que se ha excusado después de que su pareja haya perdido el hijo que esperaban.


Los restos de Fabiola permanecerán en palacio hasta mañana por la noche, en la víspera del funeral nacional que se celebrará el viernes en la Catedral de Santa Gúdula y donde se esperan autoridades y miembros de casas reales.


Entre las casas reales, ya han confirmado su presencia en esos funerales los Grandes Duques de Luxemburgo, Enrique y María Teresa, que estarán acompañados por los príncipes herederos del vecino país, así como la emperatriz Michiko de Japón, de 80 años y quien guardaba una estrecha amistad con la reina Fabiola.


Los funerales de la viuda del rey Balduino desde la catedral bruselense serán retransmitidos el viernes en directo por las televisiones públicas belgas, al igual que hará en Holanda la radio pública NPO.


La Casa Real belga ha decidido también celebrar una segunda ceremonia fúnebre en la iglesia del castillo de Laeken, que se abrirá al público una vez hayan finalizado los funerales nacionales.