El ébola y el Estado Islámico entran con fuerza en las elecciones legislativas de EE. UU.

?En las semanas previas a los comicios la campaña se hace a escala muy local.

Imagen del vídeo del Estado Islámico
El ébola y el Estado Islámico entran con fuerza en las elecciones legislativas de EE. UU.

Los numerosos frentes abiertos con que se encuentra EE.UU. en materia de política exterior van a acaparar la campaña para los comicios legislativos del próximo 4 de noviembre, con el ébola y el Estado Islámico (EI) como las nuevas y principales preocupaciones de los ciudadanos.


Las elecciones, en las que se renueva la totalidad de la Cámara de Representantes y dos tercios del Senado, son determinantes para verificar con qué legislativo se va a encontrar el presidente estadounidense, Barack Obama en los dos últimos años de su mandato.


Hasta ahora los republicanos tienen la mayoría en la Cámara de Representantes (la cual parece que van a seguir manteniendo) mientras que la verdadera pugna se centra en seis escaños del Senado, que pueden cambiar de titular y pasar al Partido Republicano, que, de este modo, dominaría la totalidad del Congreso.


En las semanas previas a los comicios la campaña se hace a escala muy local, con visitas puerta a puerta de los candidatos por los distritos y con debates muy centrados en sus comunidades, sin que de momento se eleve el tono a temas de ámbito nacional.


Sin embargo, a falta de un argumento político sobre el que luchar en la esfera pública, como en el pasado fue la crisis económica, los primeros casos de ébola en el país y la cada vez más clara amenaza yihadista empiezan a hacerse un hueco especial en los comicios.


Una encuesta revelada esta semana por el diario The Wall Street Journal y la cadena NBC muestra que la lucha contra el EI ocupa el tercer lugar entre los temas que más preocupan a los votantes estadounidenses en lo que se refiere a la actividad del Congreso, por encima incluso de la creación de empleo y el bloqueo político que vive Washington.


Existe además, según los datos del mismo sondeo, un apoyo creciente al uso de las fuerzas terrestres de Estados Unidos para combatir a los yihadistas, algo que se ha incrementado a medida que la amenaza ha sido más patente en las últimas semanas.


En este sentido, las posturas de republicanos y demócratas no difieren tanto en materia legislativa, pues tanto unos como otros han mostrado su apoyo a la ofensiva ordenada por Obama contra el EI, circunscrita, eso sí, a bombardeos aéreos.


Sin embargo, los ciudadanos culpan a Obama de la situación, y sus índices de aprobación en política exterior se desploman.


El brote de ébola también ha cobrado especial relevancia para los votantes, el 98 por ciento de los cuales afirma haber recibido información en los medios acerca del virus, una cifra que el "Wall Street Journal" califica como "sin precedentes" en comparación con otros grandes acontecimientos observados por la opinión pública.


Sobre la alerta sanitaria, los republicanos han optado por defender una postura mucho más alarmista y han reiterado a Obama que debe restringir los vuelos procedentes de África Occidental y ser mucho más duro en las medidas de contención de la enfermedad.


"Algo raro va a pasar en la noche electoral", predijo Bill McInturff, el encuestador republicano que dirigió el sondeo junto a demócrata Fred Yang.


"Cuando se trabaja con un electorado inestable, hay que tener un comodín que otorgue un poco de precaución", agregó el experto respecto al impacto de la política exterior actual de la Administración Obama y los últimos sucesos internacionales.


El presidente bate su propio récord a la baja respecto a la aprobación ciudadana de su agenda diplomática con un 31 % de respaldo.

Sin embargo, el Congreso tampoco se queda atrás, al alcanzar un mínimo histórico del 12 %.

Este descontento ha hecho que uno de cada ocho individuos de los 1.000 encuestados (con un margen de error de 3,8 puntos porcentuales) dijeran que votarán a un candidato de un tercer partido si tienen la oportunidad.


Y es que preguntados por quiénes son los culpables de la falta de efectividad legislativa, el 26 % nombró al presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, mientras que el 21% citó al líder de la mayoría demócrata del Senado, Harry Reid, y con el mismo porcentaje a la líder de la minoría en la cámara baja, Nancy Pelosi.


Las turbulencias también provocadas en los últimos meses por la crisis en Ucrania o los nuevos enfrentamientos entre israelíes y palestinos han ido influyendo paulatinamente en la percepción de los ciudadanos sobre la política del país, haciendo de la agenda exterior un asunto cada vez más prioritario tras años centrados en la política económica a consecuencia de la crisis.