La OTAN creará una fuerza rápida de soldados para responder en Ucrania

La agresión rusa ha precipitado la creación que contará con "varios miles" de efectivos.

Los jefes del Estado y de Gobierno de la OTAN darán luz verde a la creación de una fuerza de "varios miles" de soldados que podrá desplegarse en cualquier país en "muy pocos días" para responder a crisis como la agresión rusa en Ucrania en la cumbre que acogerá este jueves y viernes la localidad galesa de Newport, en Reino Unido.


La nueva fuerza de alta disponibilidad, a la que contribuirán los aliados por rotaciones y que el secretario general aliado, Anders Fogh Rasmussen, ha calificado de "punta de lanza" de la actual Fuerza de Reacción Rápida ya en pie de hasta 13.000 efectivos, forma parte del Plan de Acción que aprobarán en respuesta directa a la agresión rusa en Ucrania pero pensado para permitir a la OTAN responder "a todos los desafíos de seguridad, con independencia de donde surjan", es decir también desde el flanco sur, como han reclamado España, Italia y Grecia, según fuentes militares aliadas.


Según varias fuentes militares y aliadas, la fuerza podría contar con entre 4.000 y 6.000 militares y su propio elemento de mando y control y deberá ser capaz de desplegarse en "dos o tres días", aunque las cifras no se concretarán hasta después de la cumbre, en base a nuevas recomendaciones que pedirán a las autoridades militares aliadas y dependerán en todo caso de "la situación y amenaza" concretas.


Para facilitar el despliegue de tropas, el plan contempla la creación de la infraestructura necesaria y el preposicionamiento de equipos y suministros como combustible y munición y capacidad de mando y control para garantizar un refuerzo rápido sobre el terreno en los países del este de la OTAN, aunque Rasmussen ya dejó claro que todavía no se ha decido el número de "bases operativas avanzadas" que habrá en los países del Este de Europa. También se estudiarán "posibles refuerzos en las infraestructuras nacionales, que pueden incluir aeródromos y puertos, para apoyar refuerzos si surge la necesidad".


La mayoría de países, incluidos Francia, España e Italia, rechazaban la idea de crear bases permanentes de la OTAN en los países del este de Europa frente a los países del Este, que contaba con el apoyo de EEUU y Reino Unido. Los aliados evitarán además calificar por su parte a Rusia como "un adversario" en su declaración final, según varias fuentes aliadas y diplomáticas consultadas.Refuerzos en el Este, pero no bases permanentes


Rasmussen ha confirmado que las medidas de refuerzo respetarán el pacto con Rusia de 1997, conocido como el Acta Fundacional del Consejo OTAN-Rusia, que restringe el despliegue de tropas aliadas de forma permanente en los países del Este y ha restado importancia al hecho de que no haya bases permanentes: "Tendremos una presencia de la OTAN más visible en el este el tiempo que sea necesario", ha zanjado. "No estamos hablando de nada permanente, estamos hablando de rotaciones de tropas el tiempo que sea necesario", ha precisado una fuente de alto nivel aliada.


Los aliados también acordarán mantener en 2015 el refuerzo militar por mar, aire y tierra en los países del Este de Europa por rotaciones acordada en los países bálticos, Polonia y Rumanía tras la anexión de Crimea por parte de Rusia y cuyo grueso ha asumido Estados Unidos, según una fuente diplomática aliada, que ha avanzado que la idea es que la nueva fuerza rápida asuma estas garantías de protección a los países del este una vez esté operativa, en 2015.


Los aliados todavía no han designado un cuartel general encargado del "planeamiento de la defensa colectiva" pero varias fuentes diplomáticas y militares ven al cuartel general multinacional en Szczecin, en Polonia, "un candidato obvio". Alemania, Dinamarca y Polonia anunciaron en junio un acuerdo para reforzar la preparación del cuartel multinacional, creado en 1999 en Polonia, y han invitado a otros aliados a contribuir. El cuartel es clave para planificación y organizar ejercicios, pero también podría asumir el mando de una operación. El cuartel cuenta con algo más de 200 militares, pero podría duplicar en número.


El plan de acción, que debe permitir responder también a la nueva amenaza de guerra híbrida que incluye operaciones militares encubiertas pero también el sabotaje económico, propaganda y ciberataques, también contempla el refuerzo de los ejercicios para garantizar que las tropas aliadas están listas para el combate, reforzar las agrupaciones  permanentes navales de la OTAN, así como mejorar la capacidad de alerta temprana, la recogida e intercambio de inteligencia y el refuerzo de los planes de defensa.


Se espera que el primer ministro británico, David Cameron, anuncie la creación de una fuerza expedicionaria conjunta con otros seis países de la OTAN en la cumbre. Reino Unido acordó en junio crear una fuerza conjunta con Lituania, Estonia, Letonia, Países Bajos, Noruega y Dinamarca. La fuerza, según avanzó el viernes el 'Finantial Times', contará con unos 10.000 efectivos.


Esta fuerza "podrá utilizarse para una amplia gama de operaciones, incluido misiones de gestión de crisis y tareas de mantenimiento de paz" y podrá trabajar de forma "conjunta" con "la punta de lanza" de la fuerza aliada, cuyo "principal objetivo es la defensa colectiva", ha aclarado la portavoz de la OTAN, Oana Lungescu.


Se espera que los aliados también se comprometan a destinar más presupuesto a la defensa teniendo en cuenta los objetivos voluntarios en la OTAN de destinar el 2% del PIB a defensa y el 20% del mismo a los equipos e investigación tecnológica a medida que avance la recuperación económica.


Los jefes de Estado y de Gobierno, que han invitado al presidente ucraniano, Petro Poroshenko, a la cumbre en clara señal de solidaridad frente a Rusia, anunciarán su contribución financiera para ayudar a las fuerzas ucranianas a mejorar en logística, mando y control, ciberdefensa y apoyo al personal militar a través de cuatro fondos fiduciarios, aunque no se espera que aprueben armamento militar, como ha solicitado Kiev.


Y aplazarán toda decisión sobre avanzar en la ampliación de la OTAN, a pesar de su decisión en 2008 de que Georgia y Ucrania se convertirían en miembros cuando cumplan las condiciones y el cambio de postura de Kiev, que hasta ahora había perseguido una policía de no alineamiento.


En cambio, sí ofrecerán a Georgia, Australia, Finlandia, Suecia y Jordania ser socios privilegiados y estrechar la cooperación con la OTAN.El desafío del Estado Islámico


El otro tema que dominará previsiblemente la cumbre es el avance del Estado Islámico en Iraq y Siria. Se espera que el presidente estadounidense, Barack Obama, pida al resto de aliados que apoyen sus esfuerzos contra el grupo terrorista tras haber autorizado bombardeos sobre sus posiciones y la entrega de armas a las fuerzas iraquíes y kurdas. Francia está suministrando también armas y otros como Alemania, Reino Unido e Italia también han aceptado.


Los aliados discuten que la OTAN actúe como una plataforma de intercambio para saber quién suministra qué, compartir más inteligencia sobre la situación y la posibilidad de dar asistencia de formación a Iraq para consolidar sus capacidades de defensa, una vez se establezca el nuevo Gobierno.


También confirmarán su intención de lanzar una nueva operación de entrenamiento, asesoramiento y asistencia a las fuerzas afganas a partir de 2015, que contaría con un máximo 12.000 efectivos y cuyo despliegue está condicionado a que el nuevo presidente afgano firme los acuerdos de seguridad necesarios con EEUU y la OTAN.