Los líderes de las dos principales facciones palestinas hicieron este miércoles un nuevo llamamiento a la unidad para "hacer frente a la agresión" israelí en un día en el que el número de víctimas mortales en la tercera operación bélica de Israel contra el movimiento islamista Hamás superó el medio centenar.

El llamamiento se produjo la misma jornada en la que primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, contactó con líderes mundiales para explicarle la operación "Margen Protector" y convencerles de que Hamás es el culpable de la escalada.

El líder de ese grupo palestino en el exilio, Jaled Meshal, aseguró hoy en Qatar que el único objetivo de Netanyahu es romper el acuerdo de reconciliación nacional que Hamás firmó el pasado 23 de abril con el partido nacionalista Al Fatah, que dirige el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abas.

Ese pacto acabó con siete años de división política palestina y permitió, el pasado 2 de junio, la formación de un gobierno de unidad transitorio, integrado por tecnócratas, cuyo objetivo es convocar elecciones a principios de 2015.

"El primer ministro israelí nunca ha estado interesado en la reconciliación palestina y desde el primer momento se ha dedicado a socavarla", afirmó.

Meshal aseguró también que dentro de esa estrategia, el gobierno israelí ha bloqueado el dinero enviado por Qatar a la ANP para el pago de los salarios de los funcionarios de Gaza y ha utilizado el asesinato de tres jóvenes israelíes desaparecidos durante casi tres semanas en Cisjordania.

"El secuestro fue la mecha para Netanyahu. Como si la ocupación, las colonias y el bloqueo a Gaza no fuera una flagrante violación de los derechos palestinos. El que quiera calma a cambio de calma no lo hace así", afirmó Meshal, quien dijo no tener información de un secuestro que no obstante aplaudió.

A este respecto, insistió en que la solución del actual conflicto armado pasa por que el gobierno israelí acepte el fin de la ocupación y la liberación de presos.

"Debe poner fin de inmediato a los bombardeos y también a la ocupación. Vosotros israelíes, debéis culpar y pedir responsabilidades de esto a Netanyahu y su gobierno de extremistas, que son la razón de que estéis en refugios", afirmó.

Meshal sostuvo que Israel no es capaz de mantener un operativo de esta intensidad durante mucho tiempo e instó a las facciones palestinas en Gaza y Cisjordania a "asumir la responsabilidad y hacer frente unidos a Israel hasta alcanzar la liberación", con especial énfasis a la ANP, a quienes le recordó que "somos hermanos"

Horas antes, el propio Abás había tendido el guante de la unidad al asegurar que la ofensiva de Israel sobre Gaza es "un ataque a todo el pueblo palestino".

Abás también pidió hoy al presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi, que intervenga para detener "la escalada de violencia de Israel en Gaza".

Según un comunicado divulgado por la agencia de noticias local, ambos mandatarios conversaron por teléfono sobre la situación que se vive en la Franja  y sobre los pasos a dar, tanto frente a Israel como frente a Hamás y a la comunidad mundial, para detener la operación.

Fuentes palestinas explicaron que una de las opciones es reunir apoyos mundiales para que presionen a Israel, que el martes lanzó la operación "Margen Protector" con el objetivo declarado de debilitar a Hamás y detener el lanzamiento de cohetes desde la Franja.

En un comunicado emitido en el Cairo, Al Sisi confirmó que está en contacto continuo con todas las partes y consideró que Israel es "plenamente responsable, como potencia ocupante, de asegurar las vidas de la población civil palestina de acuerdo al derecho internacional".

Las gestiones de Egipto buscan cesar "las medidas provocadoras y crear las condiciones necesarias para reanudar las conversaciones de paz" entre palestinos e israelíes, agregó el portavoz presidencial, Ehab Badawy.

También Netanyahu contactó hoy con diversos líderes mundiales para explicarles la operación, de cuyo inicio responsabiliza a Hamás.

Según la prensa local, el jefe del Gobierno israelí telefoneó al secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, a la canciller alemana, Angela Merkel, y al secretario de Estado de EEUU, John Kerry.

A todos ellos les recordó que Hamás está considerado un grupo terrorista por la comunidad internacional y que ningún país puede vivir bajo la amenaza de los cohetes y de las infiltraciones desde territorio enemigo.