Primer ministro libio

Ali Zidán califica su secuestro de intento de"golpe de Estado"

Ali Zidán permaneció este jueves alrededor de diez horas secuestrado por un grupo de hombres armados adscritos a los cuerpos de seguridad.

El primer ministro libio Ali Zeidan ha sido secuestrado
Un grupo de hombres armados secuestra al primer ministro libio
AFP

El primer ministro libio, Ali Zidán, ha asegurado este viernes que el secuestro que sufrió este jueves por parte de un grupo de hombres armados fue un intento de "golpe de estado contra la legitimidad" de las urnas.


En un discurso a la nación, Zidán ha subrayado que los secuestradores actuaron bajo las órdenes de un alto responsable, que no identificó, y ha agregado que le dijeron que pertenecían a la denominada "Oficina de los Revolucionarios de Libia", cuerpo dependiente del Ministerio de Defensa y formado por antiguos milicianos que lucharon en la guerra que puso fin al régimen del coronel Muamar el Gadafi (1969-2011).


Asimismo, ha insistido en que "lo ocurrido no está relacionado con el jefe del Gobierno, sino con la legitimidad del pueblo libio".


El primer ministro libio permaneció este jueves alrededor de diez horas secuestrado por un grupo de hombres armados adscritos a los cuerpos de seguridad, que lo capturaron en un céntrico hotel de Trípoli, donde reside, y donde fue liberado por las fuerzas de seguridad.


"Hay quien quiere empujar a Libia hacia lo desconocido y convertirla en un nuevo Afganistán o una nueva Somalia", ha dicho el primer ministro, que no ha identificado a estas personas o grupos, a quienes también ha acusado de "obstaculizar la construcción del Ejército y la Policía".


Tras la caída del régimen dictatorial de Gadafi, la debilidad de los aparatos de seguridad, la proliferación de armas y la existencia de milicias semiautónomas han impedido al Ejecutivo libio imponer su autoridad en gran parte del país.


Zidán, que ha denunciado el robo de sus documentos y pertenencias, ha hecho hincapié en que no piensa dimitir por lo ocurrido sino que seguirá "luchando" al frente de su gobierno.


No obstante, ha apuntado que su equipo está "listo para marcharse", pero siempre que sea por medios legítimos.


En su discurso también ha llamado a la unidad de sus conciudadanos y ha declarado que "son necesarios los esfuerzos de todos para hacer frente a los elementos que quieren obstaculizar la construcción del estado".


Este jueves, en sus primeras declaraciones tras su liberación, Zidán ya apuntó que lo ocurrido respondía a "disputas políticas internas", y mostró su deseo de que el problema se solucione sin "tensiones ni escaladas de violencia".