Terrorismo

EE.UU. apunta a Yemen como foco de la alerta terrorista mundial

El Gobierno estadounidense ha instado a sus ciudadanos a no viajar al país y a salir "inmediatamente" a los que viven allí.

Un grupo de viajeros, en el aeropuerto de Yemen.
EE.UU. apunta a Yemen como foco de la alerta terrorista mundial
EFE

Estados Unidos apuntó este martes a Yemen como probable foco de la alerta terrorista que ha provocado el cierre de una veintena de sus sedes diplomáticas, al ordenar a sus ciudadanos que abandonen "inmediatamente" el país y retirar al personal no esencial de su embajada en Saná, un paso imitado por el Reino Unido.


Cuatro días después de emitir una alerta mundial por la posibilidad de ataques de Al Qaeda en Oriente Medio y el Norte de África, el Departamento de Estado lanzó este martes una nueva alerta de viaje que subraya el riesgo en Yemen, al señalar que los ciudadanos estadounidenses que se encuentran en ese país "deben salir" de él.


"Estamos preocupados por una corriente de amenazas que indica la posibilidad de ataques terroristas contra personas o instalaciones estadounidenses en el exterior, sobre todo procedentes de la Península Arábiga", advirtió la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki, en un comunicado.


En su alerta, Estados Unidos instó "a los ciudadanos estadounidenses a no viajar a Yemen y a los que viven allí a salir inmediatamente del país", debido a un nivel de la amenaza contra la seguridad "extremadamente alto".


La Casa Blanca ya había admitido este lunes que la amenaza "emana o se dirige a la Península Arábiga", y el Departamento de Estado subrayó este martes su inquietud por el papel en la trama de Al Qaeda en la Península Arábiga (AQPA), con sede en Yemen.


"Hemos dejado clara nuestra preocupación por AQPA, y todos sabemos donde se encuentra la sede de AQPA", dijo Psaki en su conferencia de prensa diaria.


Fuentes oficiales estadounidenses dijeron el lunes a The New York Times que la alerta se desató por varios mensajes entre el líder de Al Qaeda, Aymán al Zawahiri, y el jefe de AQPA, Nasser Al Wuhayshi, que hablaban de un ataque el pasado domingo, un extremo que no ha sido ni confirmado ni desmentido por el Departamento de Estado.


No obstante, Estados Unidos acompañó este martes la alerta sobre Yemen con un ataque de uno de sus aviones no tripulados en el norte de ese país, que acabó con al menos cuatro supuestos integrantes de AQPA.


Mientras, el personal diplomático no esencial de la embajada estadounidense en Saná abandonó el país rumbo a Alemania, lo que reduce la presencia norteamericana en Yemen a unos pocos funcionarios encargados de tareas de emergencia.


Por su parte, el Reino Unido informó también este martes de que ha retirado de manera temporal a todo el personal de su embajada en Yemen por temores de seguridad.


Estados Unidos mantiene cerradas 19 sedes diplomáticas, entre ellas las de Jordania, Yemen y Egipto, que no abrirán hasta el próximo sábado por precaución, mientras que otras como las de Afganistán e Irak reabrieron el lunes con normalidad. "Ésta es una situación que evaluamos día a día", subrayó Psaki.


El presidente de EE.UU, Barack Obama, está informado "a tiempo real" del desarrollo de la posible amenaza, que "sigue en pie y es seria", indicó este martes el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney.


El Gobierno de Yemen ha reaccionado con escepticismo a la reducción del personal estadounidense y británico en su país, y el Ministerio yemení de Exteriores indicó en un comunicado que "la evacuación del personal de las embajadas sirve a los intereses de los extremistas".


El Departamento de Estado rechazó este martes esa idea y destacó que mantiene una buena cooperación con el Gobierno de Yemen en materia antiterrorista, pero se ha visto obligado a responder a lo que veía como "una amenaza específica e inmediata", en palabras de Psaki.


"Seguimos trabajando con los yemeníes en una serie de asuntos. No esperamos que esto impacte nuestra relación con ellos", afirmó.


La amenaza, calificada por varios senadores estadounidenses como "la más seria" de los últimos años, ha generado un nerviosismo en EE.UU que comenzó el domingo con el cierre de 22 sedes diplomáticas en el mundo musulmán y se ha prolongado debido al carácter continuo del riesgo, según Washington.