Egipto
Calma en la plaza Tahrir tras los disturbios de este viernes
Varios camiones de limpieza se afanaban en eliminar los restos de la batalla campal de este viernes que se saldó con 121 heridos.
La calma reinaba este sábado en la plaza Tahrir, en el centro de El Cairo tras los choques de ayer entre centenares de partidarios y detractores del presidente egipcio, Mohamed Mursi, que causaron 121 heridos, según las últimas cifras oficiales.
La agencia Efe pudo constatar que la normalidad imperaba a primera hora de la mañana en la plaza, donde varios camiones de limpieza se afanaban en eliminar los restos de la batalla campal del viernes después de que los manifestantes se retiraran anoche.
Los servicios de limpieza concentraban su trabajo en la esquina entre Tahrir y la calle de Mohamed Mahmud, foco principal de los choques.
La circulación de vehículos era fluida en Tahrir, donde este sábado había varios policías de tráfico, pese a que este viernes no hubo ningún tipo de despliegue de seguridad en la plaza durante los enfrentamientos.
Según la agencia de noticias estatal egipcia, Mena, el jefe del Departamento de Primeros Auxilios del Ministerio de Sanidad, Mohamed Sultán, informó la pasada madrugada de que el recuento total de heridos ascendió a 121, la mayoría con contusiones y fracturas.
Sultan precisó que cuatro lesionados se encontraban graves.
Los choques comenzaron poco después del mediodía tras la oración musulmana del viernes entre seguidores de los Hermanos Musulmanes, grupo al que pertenecía Mursi antes de acceder a la Presidencia, y detractores del jefe de Estado.
En la plaza, había dos manifestaciones convocadas: una organizada por grupos laicos y revolucionarios para rechazar la gestión de Mursi y otra de la Hermandad para rechazar la sentencia de absolución emitida esta semana contra altos cargos del antiguo régimen de Hosni Mubarak acusados de la muerte de manifestantes durante la revolución.
Conforme fueron pasando las horas, los enfrentamientos se intensificaron en Tahrir hasta que los Hermanos Musulmanes y el movimiento Jóvenes del 6 de Abril, uno de los convocantes de la protesta anti Mursi, además de otros grupos laicos, desconvocaron las protestas y pidieron a sus seguidores que se marcharan.
