Tormenta tropical

EE.UU. recuerda el séptimo aniversario del 'Katrina' con la llegada de 'Isaac'

Alrededor de 228.000 hogares y negocios permanecen sin electricidad en el sureste de Luisiana y los fuertes vientos están derribando algunas de las barricadas.

Estados Unidos recuerda el séptimo aniversario del huracán 'Katrina', que destrozó la ciudad de Nueva Orleans y causó 1.800 muertos, con la llegada a la costa de Luisiana de otro huracán, 'Isaac'.


En Nueva Orleans, en estado de emergencia y mucho mejor preparada que entonces, no hay tiempo para conmemoraciones, y si bien la intensidad de 'Isaac' no es comparable con la de 'Katrina', es inevitable pensar en la fatal coincidencia de que otro huracán amenace la ciudad siete años después.


'Isaac' tocó tierra el martes por la noche en el extremo sureste de Luisiana como huracán de fuerza uno causando las primeras inundaciones y dejando a más de 180.000 hogares sin electricidad, y puso rumbo a Nueva Orleans.


Homenajes en las redes sociales

Con esa situación sobre el terreno, los homenajes a las víctimas del 'Katrina' fueron este miércoles mayoritariamente virtuales y se concentraron en redes sociales, como Twitter.


En los escasos ciento cuarenta caracteres que permite Twitter, se podían leer mensajes como el de @tracysolomon: "Mi corazón está con las familias y seres queridos en Nueva Orleans que están reviviendo los recuerdos del Katrina".


El 29 de agosto de 2005, el ojo del huracán 'Katrina' tocó tierra cerca de la desembocadura del río Misisipi, en el Golfo de México, con vientos de unos 200 kilómetros por hora.


Aunque para entonces era un huracán de categoría 3 (en la escala Saffir-Simpson de 1 a 5), las crecidas que provocó en el lago Pontchartrain y las tierras bajas del delta del Misisipi causaron una inundación masiva y uno de los peores desastres en la historia de Estados Unidos.


La destrucción que causó fue valorada en unos 80.000 millones de dólares y por ello se convirtió en el desastre natural más perjudicial de la historia estadounidense.


La falta de respuesta unificada por parte de las autoridades federales y estatales agravó aún más la situación por la ausencia de evaluación previa y el retraso en el envío de la ayuda, lo que dejó la ciudad totalmente colapsada y abandonada a su suerte durante varios días.


"La mayor lección que hemos aprendido es que tenemos que trabajar juntos como un equipo al nivel estatal y federal", señalaba esta semana el director de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA), Craig Fugate.


Así, el alcalde de Nueva Orleans, Mitch Landrieu, declaró ya el pasado domingo el estado de emergencia y el centro de operaciones de alerta y socorro de la ciudad está operativo las 24 horas, con los organismos municipales de seguridad trabajando a su máxima capacidad.


Esta es otra historia

"Estamos mucho mejor preparados y capacitados que nunca", aseguró Landrieu, quien pidió a los ciudadanos que se queden en sus casas hasta que pase el nuevo temporal, que se espera que deje fuertes lluvias de entre 25 y 40 centímetros.


Uno de los peores problemas que afectó a Nueva Orleans con el 'Katrina' fue que los diques que contienen el lago Pontchartrain y del Delta del Misisipi se derrumbaron y las aguas inundaron el 80%de la capital, causando daños en 180.000 viviendas.


En estos siete años, el Gobierno federal ha invertido 14.500 millones de dólares en proteger la ciudad, principalmente para reforzar los diques y mejorar los sistemas de drenaje y evacuación de agua, según explicó el experto medioambiental del Times-Picayune, Mark Schleifstein, a la cadena nacional de radio NPR.


El impacto del 'Katrina' también afectó a la población de la famosa ciudad del sur de Estados Unidos, de la que salieron cerca de la mitad de sus 455.000 habitantes, aunque en el último informe de la Oficina del Censo nacional, con datos de 2010, ya ascendía a 343.000 habitantes.


Schleifstein, residente en Nueva Orleans, asegura que la ciudad se recupera aunque "depende de qué parte veas". "En la parte oeste, con más posibles, se recuperó rápido". Sin embargo, en el este, "donde la media de ingresos es baja y los residentes tuvieron más dificultades para volver inmediatamente después del 'Katrina' para restaurar sus casas, ha sido menor". "Todavía queda trabajo por hacer", aseguró.