​Ibáñez, mucho más que Mortadelo y Filemón

La exposición 'Francisco Ibáñez, el Mago del Humor' se podrá contemplar en el Centro de Historias de Zaragoza hasta el 5 de abril.

'Francisco Ibáñez, el Mago del Humor'
​Ibáñez, mucho más que Mortadelo y Filemón

Más conocido por sus célebres personajes de Mortadelo y Filemón, Francisco Ibáñez es "mucho más", capaz de un dibujo maravilloso, creador de "chistes muy divertidos", que dio vida a numerosos personajes del tebeo español que forman parte de la infancia de los españoles desde los años 50 hasta la actualidad.


Esto es lo que pretende mostrar la exposición 'Francisco Ibáñez, el Mago del Humor' que se podrá contemplar en el Centro de Historias de Zaragoza hasta el 5 de abril y en la que el visitante descubrirá matices desconocidos de este cómico del papel, "políticamente incorrecto" y cuyas historias siguen haciendo reír generación tras generación.


Así lo han explicado los comisarios Elena Vergara, creadora de la muestra, y el experto de la historieta y del tebeo Antonio Guiral, durante la presentación de la exposición en rueda de prensa.


Nacido en 1936, Ibáñez logró su primera publicación con 16 años y fue creador de algunos de los personajes más célebres del tebeo español, ya que además de Mortadelo y Filemón, que muchos de los niños de hoy conocen gracias al cine, fue el padre de Rompetechos, Pepe Gotera y Otilio, de la comunidad de vecinos de la 13 Rue del Percebe o del botones Sacarino, profesión en la que el artista se inició en el mundo laboral.


Como ha explicado Guiral, Ibáñez era capaz de crear una única historia con dos lecturas, una para niños y otra para adultos, además con infinidad de gags, una de sus habilidades junto a su capacidad para desarrollar una misma historia y presentarla de forma distinta.


La exposición hace un repaso a su biografía y un análisis de su obra y de sus personajes principales y presta atención a su vinculación con las editoriales en las que colaboró a lo largo de su carrera, la evolución de su estilo y sus técnicas, sus motivaciones y el contexto en el que desarrolló su trabajo.


Así, un primer bloque recoge su línea de vida y bibliografía con reproducciones, un segundo introduce al visitante en sus primeros personales, mientras que el tercero se centra en su etapa en la editorial Bruguera y el cuarto en sus grandes personajes para concluir con un último apartado en el que se hace un análisis de su obra sobre el proceso de creación de una plancha.


Además de un audiovisual del "cómo se hizo" la película 'Mortadelo y Filemón contra Jimmy el Cachondo', en la exposición se podrá conocer el humor de la postguerra, la censura, autocensura y las herramientas que utilizaban los autores para eludirla, la influencia de los cómics franco-belgas en el tebeo español y las diferencias entre grandes revistas como Pulgarcito, TBO y DDT.


Guiral ha destacado los veinte originales que se pueden contemplar en la exposición y que permiten observar cómo el autor ha retocado las historietas y descubrir que una que ha acabado siendo de Mortadelo y Filemón estaba pensada para otros personajes.


Para Guiral, Ibáñez es "nuestro patrimonio, nuestra cultura e historia sentimental", al tiempo que está convencido de que "hay pocas personas que no conozcan a Mortadelo y Filemón o a Ibáñez".


Es la opinión con la que coincide Elena Vergara, quien, cuando empezó a idear la exposición, se mostró sorprendida por la cantidad de trabajos, tesis y escritos en torno a este dibujante, y que ha destacado la "sonrisa" con que los visitantes salen de la exposición rememorando su infancia, "sean de la edad que sean".


Para visitar la exposición ya están apuntados 30 grupos y 831 escolares, ya que, según ha destacado Guiral, el tebeo es "una buena manera de introducir a los niños en la lectura".