Una sola intoxicación etílica y dos conductores ebrios en una 'Cerradura' con 3.000 asistentes

La Policía Local recibió algunas llamadas de vecinos quejándose del ruido y de la suciedad de los botellones.

Varias decenas de jóvenes apuraban la fiesta al mismo tiempo que comenzaban las labores de limpieza del recinto ferial.
Una sola intoxicación etílica y dos conductores ebrios en una 'Cerradura' con 3.000 asistentes
RAFAEL GOBANTES

Protegidos con sombreros para resguardarse de los primeros rayos de sol, decenas de estudiantes apuraban a las 7.30 de la mañana de ayer los últimos coletazos de la 'Cerradura' 2010, una macro fiesta con la que los universitarios de Huesca y de otras poblaciones cercanas como Zaragoza o Lérida celebran desde hace 18 años el final de curso y, de paso, recaudan dinero para financiarse sus viajes de fin de carrera.

Y eso que los organizadores, cumpliendo el compromiso adquirido con el Ayuntamiento de Huesca, bajaron el volumen de la música de las barras dos horas antes. Pese a ello, algunos rezagados se resistían a regresar a sus casas para descansar después de una de las noche más largas del curso.

La alegría de los asistentes se entremezclaba con las labores de limpieza que desde primera hora comenzaron a realizar los operarios de las brigadas municipales, que tuvieron que afanarse hasta casi el mediodía para hacer desaparecer el rastro de suciedad de la fiesta, miles de vasos, botellas y bolsas de plástico esparcidas por el recinto ferial del polígono 29.

Fue el final de una juerga que no quisieron perderse miles de estudiantes, si bien fuentes del Ayuntamiento y de los servicios de emergencia que actuaron en la fiesta aseguraron que la afluencia no fue tan masiva como en ediciones anteriores. Los cálculos arrojan una cifra de asistentes algo superior a las 3.000 personas.

22 asistencias médicas

Esa quizá fue una de las causas de que los voluntarios de Cruz Roja que formaron el operativo sanitario -cinco personas y una ambulancia de soporte vital básico- apenas realizaran 22 asistencias en toda la noche. De ellas, 19 fueron intervenciones leves por cortes, hematomas y alguna torcedura, mientras que solo 3 casos requirieron el traslado al Hospital San Jorge de Huesca: una intoxicación etílica y dos contusiones.

Desde la Policía Local también destacaron la "tranquilidad" con la que transcurrió la fiesta ya que apenas hubo incidentes reseñables. La prueba es que aunque se establecieron controles de alcoholemia preventivos en las entradas y salidas de ciudad, solo se registraron dos alcoholemias positivas que, de hecho, se produjeron a primera hora de la mañana.

En un caso, un joven fue detenido por superar la tasa de alcohol de 0,60 tras protagonizar una colisión con otro vehículo. Mientras, el otro positivo fue una infracción administrativa. "Ha sido una noche más tranquila y con menos incidentes que cualquier otro jueves del año porque la gente se ha concentrado en un solo lugar", subrayó la Policía Local.

Fuentes municipales reconocieron también que la centralita de la Policía Local había recibido a lo largo de la noche algunas llamadas de vecinos del entorno del polígono 29 quejándose del ruido provocado en la calle por el paso de grupos de jóvenes hacia la fiesta y por el equipo de música del recinto. Además, el presidente de la Asociación de Vecinos de Santo Domingo, Antonio Tuda, también mostró su malestar por los números botellones que se repartieron antes de la fiesta por parques y plazas del barrio.

Los efectivos de la Policía Nacional también reforzaron el operativo de prevención de drogas en las inmediaciones de la 'Cerradura', aunque el número de denuncias fue sensiblemente menor al de otros años también. Fuentes de la comisaría oscense informaron de que los agentes levantaron nueve actas por posesión de sustancias estupefacientes y una por tenencia de armas prohibidas.

Detenido por atentado

La Policía Nacional, además, detuvo a un joven por un presunto delito de atentado a un agente de la autoridad después de que, al parecer, se abalanzara sobre un policía que estaba intentando registrar el interior de su vehículo. Aunque no llegó a agredirle, el agente cayó al suelo y sufrió una lesión en la muñeca. También denunciaron a otro joven por una presunta falta de respeto a un agente de la autoridad.