Pomar de Cinca sube a Tercera

Con pocos menos de 500 habitantes y 50.000 euros de presupuesto, el Pomar de Cinca se 'presentó' ayer en Tercera División. El ascenso de La Muela a Segunda B allanó el camino. Y hubo celebración por todo lo alto. El hostal Villa de Baena fue el escenario de la fiesta que se prolongó hasta altas horas de la noche. El presidente del club, Óscar Penella, estaba feliz. A sus 36 años -20 de ellos en el equipo de su pueblo- saboreaba ayer la satisfacción del ascenso y de codearse el próximo año con el Sabiñánigo, el Barbastro, el Monzón, con los clásicos de la competición.

La esperanza por subir de categoría era tal, que varios miembros de la plantilla y vecinos de este pequeño pueblo del Cinca Medio se desplazaron a La Muela para ver el partido de los zaragozanos contra los gallegos del Cerceda. Y sufrieron mucho ya que la victoria de La Muela fue con un solitario gol en el minuto 84. Alegría tras la angustia, y todos de vuelta a Pomar del Cinca para celebrarlo. El presidente no cabía de gozo. Recordó cómo hace tres años, con él de testigo directo sobre el campo, "el Fraga nos privó del ascenso. El fútbol nos debía una, y hoy (por ayer) la hemos cobrado".

Como otros tantos equipos alejados de la élite, en pueblos como Pomar el fútbol se vive con pasión, robando horas a la vida particular sin un euro a cambio. "Es la satisfacción de que entre todos podemos hacer algo grande", indica el presidente. Lógicamente, la filosofía no cambiará en Tercera. Presupuesto justito, futbolistas de la zona y cargamentos de ilusión para disfrutar lo que se pueda.