TURISMO

Huesca gana en visitas guiadas pero Loarre y la colegiata de Bolea pierden turistas

Los gastos de pernocta o restauración disminuyen también con relación a años anteriores en la capital oscense y su entorno.

turismo en Huesca
turismo en Huesca

La capital oscense ha visto aumentar en unas 1.300 personas con respecto a 2010 las visitas guiadas a su casco urbano, sumando entre el 15 de junio y el 15 de septiembre un total 5.761, según han revelado fuentes de la Oficina de Turismo de Huesca, desde donde se organiza esta actividad.


Estas visitas guiadas se desarrollaron a lo largo del verano todos días del 11 al 31 de junio, el mes de agosto al completo con excepción de los días 9 y 10 de agosto, fiestas de San Lorenzo y las primeras semanas de septiembre. A partir del próximo fin de semana y hasta fin de año, los recorridos turísticos se limitarán a los fines de semana de octubre, los domingos de noviembre y la primera semana, al completo, de diciembre, con salida a las 11.00 desde la plaza de Luis López Allué.


Una vez nos adentramos en el entorno de la capital oscense las cifras no son, sin embargo, tan generosos. El Bus Turístico, que realiza un total de 7 rutas diferentes en un vehículo clásico por los alrededores de la ciudad ha registrado en verano un total de 490 pasajeros, una cifra que según la concejal de Turismo del Ayuntamiento de Huesca, Ana Acín «no aumenta pero tampoco disminuye la cifra registrada el año pasado».


Para la concejal, se trata así de un «complemento ideal a las visitas guiadas, ya que al finalizar su recorrido a las 14.00 en la ciudad de Huesca fomenta que los visitantes se queden a comer y pasen más tiempo de sus vacaciones en la ciudad», asegura Acín. De aquí hasta final de año, este servicio podrá usarse durante los puentes festivos de Todos los Santos y la Constitución.


En los puntos turísticos más populares de los alrededores de la capital oscense los datos hablan, por otra parte, de un descenso en el número de visitantes, con excepción del programa de visitas guiadas ‘Puertas abiertas’ de la Comarca de la Hoya de Huesca, que sumó un total de 4.190 visitantes estivales en los 17 monumentos que mantuvo abiertos durante las vacaciones, un 34,01% más que el año anterior.


Así, el castillo de Loarre recibió en el pasado mes de agosto alrededor de 14.000 visitantes, cuando en años anteriores se alcanzaba el techo de los 20.000. «Nuestro balance no es satisfactorio, sino más bien de estar aguantando. Hemos notado además un ligero descenso en los servicios paralelos al castillo, como restaurantes u hoteles, dada la actual situación económica. Si bien visitar el castillo cuesta 3 euros, hay visitantes que ya no pueden permitirse coger un día de vacaciones extra para seguir visitando la zona o quedarse a dormir o a comer», asegura Roberto Orós, gerente de la empresa Loarre Turismo Activo. Vista esta situación, Orós afirma que de cara a la próxima temporada, se buscarán nuevas formas de atraer gente a la fortaleza y su entorno.


Las mismas sensaciones tiene, por otra parte, César Pueyo, presidente de la Asociación de Amigos de la Colegiata de Bolea, otro de los monumentos más populares entre los turistas que recorren los alrededores de la capital oscense. «Todavía no contamos con cifras exactas, pero calculamos alrededor de los 12.000 visitantes durante el periodo estival. Un bajón importante, teniendo en cuenta que en temporadas como la de 2006 ó 2007 llegábamos a sumar 18.000», asegura.


Al igual que Orós, también ha detectado un descenso en el gasto medio realizado por los turistas. «Si hubieran entrado todos los visitantes que se acercaron hasta la colegiata, las cifras de visitantes no habrían disminuido. Pero ha habido gente que al ver que había que pagar 2 euros de entrada han preferido darse la vuelta, al no poder permitirse el pago de más de una entrada cuando viajaban en grupo», relata el portavoz de la asociación.-