MURILLO DE GÁLLEGO

Fiesta y reivindicación en el descenso de navata por el Gállego

Un grupo de nueve navateros recorrió 6 kilómetros en una hora y media ante la mirada de un millar de espectadores.

En una hora y media, la gran navata de tres trampos que surcó ayer las aguas del río Gállego desde la zona conocida como playa de Murillo de Gállego hasta el puente de Santa Eulalia llegó a su meta entre los aplausos de un millar de espectadores que participaron en el IX Descenso, organizado por la Coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos, que también tuvo un tono reivindicativo en señal de oposición a la construcción del pantano de Biscarrués.


La navata fue conducida por nueve personas, ocho de ellas del río Gallego y otra perteneciente a la Asociación de Navateros del Sobrarbe, a las que les acompañaron piragüistas y miembros de las GEAS de la Guardia Civil, con el fin de garantizar la seguridad de los participantes.


A las 10.00, la gente ya comenzó a acercarse a la playa de Murillo para ver la colocación de las dos remeras delanteras y las dos traseras, que este año que se han incorporado como novedad. Mientras tanto, se explicó el proceso de construcción de una navata y las tradiciones ligadas al oficio. La navata finalmente partió a las 11.30 y llegó hora y media después al puente de Hierro de Santa Eulalia de Gállego, donde el público recibió con aplausos y ovaciones a los navateros.


La Coordinadora mantiene su confianza en que esta actividad, que cumple este año su décimo aniversario, podrá realizarse durante muchos años más. En este sentido aluden a la amenaza de la posible construcción de Biscarrués, a la cual se oponen.


Por ello, este año es «especial dada la presión que se ejerce con el proyecto del pantano de Biscarrués que inundaría este tramo de aguas bravas, en el que se desarrolla esta tradición», apuntó ayer la Coordinadora en un comunicaron, en el que insisten en que «hay alternativas con menor impacto y menos costosas y la gente no entendería su apuesta por el proyecto».


Tras el descenso, se celebró una comida popular en Biscarrués, con una gran afluencia de público.