AVENTURA

Diego Ballesteros: «Esta es otra prueba de superación personal»

El barbastrense sufrió el pasado año una grave lesión cuando cruzaba Estados Unidos en bici. Ahora narra la experiencia.

Diego Ballesteros con el libro en el que narra el viaje Zaragoza-Pekín.
Diego Ballesteros: «Esta es otra prueba de superación personal»
J.L.P.

12.822 kilómetros es la distancia que separa Zaragoza de Pekín. Pero no solo es un número. Es, también, el título del libro del ciclista y aventurero barbastrense Diego Ballesteros en el que narra la gesta realizada en 2008 uniendo en bicicleta la Expo de Zaragoza y las Olimpiadas de la capital china. Ballesteros ha querido plasmar todas sus vivencias en su recorrido por catorce países durante más de tres meses en los que le ocurrió de todo y donde conoció un mundo y unas personas que le han llegado al corazón.


La publicación de la obra ha coincidido con el alta médica del aventurero barbastrense que tras sufrir un gravísimo accidente mientras competía en la Race Across America -cruzar Estados Unidos de costa a costa- ha quedado postrado en una slila de ruedas. Sin embargo, este hecho no le resta ni un ápice su espíritu deportivo. La presentación del libro tuvo lugar el pasado sábado en un abarrotado Centro de Congresos, en el que Diego recibió una calurosa y emotivo bienvenida por parte de más de doscientos vecinos y amigos.


Diego estuvo acompañado por el autor del prólogo, Pedro Solana, el ilustrador Santiago Sánchez Buatas, la diseñadora Beatriz Gimeno, y el concejal de Cultura, Santiago Lisa. El libro ha sido editado por el protagonista quien estará en la feria de la Candelera hoy miércoles en un puesto para firmar ejemplares.


Su llegada definitiva casa y la presentación de su esperado libro sobre la hazaña de Zaragoza a Pekín en bicicleta. Un doble sueño que acaba de ver cumplido y que imagino surgiría con las primeras pedaladas hacia China.


La escritura del libro, sobre todo, nace a raíz de las solicitudes que tenía en el blog que iba escribiendo en el trayecto hacia China en las que pedían que contara esas vivencias en papel. El libro, pues, es la transcripción de esa bitácora, dándole una narración más ágil para la lectura.

¿Un diario de viaje?

Sí, se puede entender así, un diario de viaje que narra cada día de la aventura que realicé hacia China. Procuro contar las anécdotas y las diferencias culturales que encuentro y que a veces dejarán extrañado al lector.

Un libro de viajes pero también de aventuras, porque su travesía en bicicleta entre Zaragoza y Pekín con sus 12.822 kilómetros de trayecto fue una auténtica aventura.

Cada día en el viaje hacia China era una aventura. Yo no sabía dónde podía encontrar un sitio para dormir, para comer, para descansar... Además de eso, el desgaste físico, las inclemencias del tiempo y otras muchas dificultades que hicieron que aunque yo tuviera una previsión nunca se llevara a término.

¿Cómo ha estructurado el libro?

El libro ha salido bastante extenso con 544 páginas. La portada la ha diseñado Beatriz Gimeno y las ilustraciones internas son de Santiago Sánchez Buatas, en las que se reflejan muchas cosas que no pude fotografiar. Pedro Solana, un gran amigo, firma el prólogo. Además hay 71 fotografías, algunas no publicadas en el blog.

¿Qué conclusión ha extraído de ese viaje al revivirlo a la hora de escribirlo?

El viaje fue una prueba de superación personal, muy parecida a la que estoy viviendo ahora, pero aquello tenía fecha de término y esta situación va a durar toda la vida. Fue una aventura que se empezó con muchísima ilusión, que ganaba en intensidad conforme pasaban los días. Llegué a Pekín exhausto después de más de tres meses pedaleando. El desgaste físico y psicológico fue enorme y es algo que marcará mi vida y mi forma de ser y ha marcado muchas de las cosas que yo hago en el día a día.

¿Cómo afronta ahora esta nueva situación en su vida?

Es difícil de afrontar, pero no queda otra. Voy a intentar no hundirme. Hasta ahora estaba en un hospital, en un ambiente muy seguro para una persona con una discapacidad como la mía. Ahora volver al mundo real, con más barreras arquitectónicas, me da cierto respeto pero tampoco le pierdo la cara. Quiero afrontar las dificultades que me van a venir cuanto antes para adaptarme a esta nueva situación. Espero superarlo. Estos dos primeros años van a ser muy importantes para que yo encuentre un sitio y siga mi vida intentando que sea lo más parecida a lo que era antes. Me gustaría no abandonar el deporte y practicar todo lo que hacía antes aunque sea desde una silla de ruedas y voy a luchar por ello.

¿Qué deportes piensa practicar?

Quiero comprarme una hand bike, una bicicleta que se propulsa con las manos y tiene tres ruedas para salir esta primavera con los amigos. También me gustaría jugar al tenis, al tenis de mesa, al bádminton y la natación que es una actividad muy saludable para todas las personas y más para mi actual condición. Voy a intentar hacer todo tipo de deportes, incluso el esquí adaptado la próxima temporada.

¿Tras su desgraciado accidente en Estados Unidos su espíritu deportista se ha acrecentado?

Más que acrecentarse quiero mantener mi forma de ser. El Diego Ballesteros que era tiene que seguir igual sobre todo por la familia, los amigos y por mí mismo. Y si algún día pudiera viajar en bicicleta sería un sueño para mí.

Desde Barbastro se ha seguido muy de cerca su recuperación y la sociedad ha querido colaborar. ¿Cómo le ha llegado esa solidaridad?

Jamás podré mostrar toda la gratitud que tengo. Estoy totalmente sorprendido y agradecido del cariño que he recibido de Barbastro y de la provincia de Huesca. Sabiendo los problemas que había con los seguros y los gastos del hospital se han volcado en iniciativas que muchas veces han surgido espontáneamente para colaborar en la causa. He visto el corazón que tiene la gente de Barbastro y su solidaridad y me faltan palabras para expresar esta gratitud. Tendría que demostrar mi gratitud a toda esta gente durante muchas vidas.

¿Qué mensaje quiere transmitir a todas esas personas que han estado detrás, apoyándole desde que se supo su accidente?

Primero, las gracias por todo su cariño y las muestras de ayuda que han hecho. El libro es una forma de dejar constancia de una historia de superación, de un viaje por muchos países, y es mi forma de agradecerles su apoyo. Barbastro siempre estuvo presente en mi viaje. También quiero agradecer a las instituciones, a los medios de comunicación, patrocinadores que me han ayudado en mis proyectos deportivos y a toda la gente de Barbastro que me ha animado en estos últimos meses que han sido los más duros de mi vida.