La Semana Santa llega a las mesas de un gran número de restaurantes de la provincia de Zaragoza recuperando los olores y sabores propios de esta época, un periodo del año donde la tradición marcaba que, desde la Cuaresma, había determinados días en los que era obligatorio dejar de comer carne. Una imposición que agudizó el ingenio culinario de nuestros antepasados, en una época en la que la variedad de alimentos era muy limitada, lo que propició el desarrollo de una tradición gastronómica en la que se impusieron los potajes, los cocidos y los guisos, así como platos de pescado, sobre todo elaborados con congrio y bacalao, que sustituían, durante estos días de pasión, a las recetas de carne.

Con el fin de recuperar estos platos y sabores, que forman parte de nuestro patrimonio cultural, la Asociación de Restaurantes de Zaragoza, Horeca; en colaboración con Zaragoza Turismo, ha convocado una nueva edición de Gastropasión, Jornadas Gastronómicas de la Semana Santa (www.gastropasion.com), en las que participan 29 restaurantes de la provincia.

Desde el 26 de marzo y hasta el 5 de abril, estos establecimientos ofrecen menús especiales de Semana Santa a precio cerrado: 20, 25 o 30 euros, con bebida incluida.

Una variada carta en la que los protagonistas son los potajes, cocidos y guisos, así como diferentes platos elaborados con pescados de lo más diversos, pero sin olvidar el congrio y el bacalao en sus múltiples variantes. Sabores de siempre, que recuerdan a la cocina de las abuelas, pero con un punto de novedad e innovación que convertirán estos menús en auténticas delicias.Los menús de Gastropasión

Entre la variedad de platos que se ofertan en los 29 establecimientos adheridos a las jornadas, puede degustarse el tradicional bacalao confitado con ali-oli de olivas negras, frito con hinojo o acompañado de un arroz cremoso con verduras. En el caso de los potajes, es posible llevarse a la boca una deliciosa cucharada de garbanzos acompañados de bogavante o un potaje de vigilia con huevo a baja temperatura y espinacas, entre otras muchas propuestas.

Variados y elaborados menús de vigilia en los que tampoco faltan las ensaladas, así como una amplia gama de pescados, como la merluza, el lenguado o el rodaballo, que sustituyen a las carnes, proscritas en el calendario culinario de este periodo de abstinencia.

En el caso de los postres, los clientes más lamineros pueden disfrutar de mil y una variedades diferentes de torrijas, con crema de orujo avainillado, caramelizada con helado de Baileys y crema de plátano, con helado de papaya y crumble de almendra, con helado de manzana o de chocolate blanco, por citar solo algunas de ellas.

Tampoco faltan en la mesa los tradicionales buñuelos, rellenos con crema pastelera o crema de anís, así como el arroz con leche, un dulce muy propio de estos días.

Sabores de siempre, los de los fogones de nuestras abuelas, pero con un toque de creatividad que convierten estos platos en una experiencia culinaria inolvidable, que ha sido posible gracias al apoyo de un nutrido grupo de colaboradores, entre los que se incluyen Zaragoza Turismo, la Diputación Provincial de Zaragoza, HERALDO DE ARAGÓN, la Junta de Cofradías de Zaragoza, Coca Cola, La Zaragozana, Grandes Vinos y Viñedos, Dr. Schar y Alimentos Made in Aragón.

Toda la información sobre los menús y precios de estos restaurantes está disponible en la web www.gastropasion.com

Los 29 restaurantes participantes

Albarracín, Blasón del Tubo, Bodega de Chema, Brujas de Bécquer, Café de la Reina, Celebris, Club Náutico, El Bandido, El Ciclón, El Español, El Patio, El Patio de Goya, El Monasterio de Santa Fe, Guetaria Eventos, Idílico, Jena, La Granada, La Jamonería, La Lobera de Martín, La Loberica, La Rinconada de Lorenzo, Las Palomas, Marengo, Más Torres, Molino de San Lázaro, Palomeque, Parrilla Albarracín, Umai, Uncastello.

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