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Ensaladilla, torrezno y huevo, ¿quién da más?

El restaurante El Disfrutón triunfa con una ración que se ha convertido en su plato más icónico.

La ensaladilla con torrezno y huevo de El Disfrutón de Zaragoza.
La ensaladilla con torrezno y huevo de El Disfrutón de Zaragoza.
K.U.

El restaurante El Disfrutón (c/ Francisco Bayeu, 4. Esquina con c/ Santiago) abrió hace un año escaso y ya tiene en su carta alguna elaboración que está dando mucho que hablar. La ensaladilla disfrutona es una de ellas.

El jefe de cocina, Nacho Leal, la ofrece en dos versiones: con torrezno, huevo frito y mayonesa de aceituna negra, y con tartar de atún rojo, huevo frito y chips de alga. "En la pelea entre el torrezno y el atún, al menos en Zaragoza, gana el primero, que tiene mucho tirón", confirma Patxi Jiménez, jefe de sala.

Cuando la puso en la carta, Patxi era muy escéptico sobre el recorrido que podría tener, pero su compañero sabía que iba a triunfar. "En Madrid la sirven con algo de tocino, bacón o jamón crujiente y, por otra parte, también la he probado combinada con huevo frito, así que ha sido cuestión de mezclarlo todo".

La ensaladilla la prepara con patata, zanahoria, guisantes y huevo duro. En cuanto a la mayonesa, le gusta de aceituna negra. "Los huevos nos los traen de Soria, de unas gallinas criadas en libertad; tienen una yema grande y densa". El torrezno también es soriano y como el huevo, comenta Patxi, "hecho al momento".

A su juicio, esta es una de las claves de que la receta funcione tan bien. "El torrezno va cortado en dados y está supercrujiente; mezclado con la untuosidad de la yema y el frescor de la ensaladilla, ofrece unas sensaciones inigualables en el paladar". La versión de atún rojo tiene un aire oriental. El tartar va con un aliño de soja, sésamo, huevas de tobiko y un poco de wasabi.

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