nutrición saludable

Un menú semanal organizado es la clave para combatir la mala alimentación

Desde el Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Aragón dan las pautas para incorporar una nutrición saludable en el día a día.

Guardar correctamente los alimentos en la nevera ayuda a organizar una dieta saludable.
Guardar correctamente los alimentos en la nevera ayuda a organizar una dieta saludable.
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Las prisas, el trabajo, la casa, hacer la compra... El estrés y las ocupaciones diarias parecen acérrimos enemigos de un estilo de vida saludable. Además de que a veces es imposible sacar un poco de tiempo para ir a entrenar o hacer algo de ejercicio, un exceso de tareas y responsabilidades también impide alimentarse adecuadamente

La excusa de la falta de tiempo para preparar una comida sana y apostar por comer fuera de casa o la necesidad de comer el en trabajo ya no sirven para justificar una nutrición pobre y poco saludable. Desde el Colegio Profesional de Dietistas-Nutricionistas de Aragón lo tienen claro y por eso explican en nueve sencillas claves para poder organizar los menús semanales y las compras y así mantener un estilo de vida saludable. 

  1. Planificar el menú y evitar la improvisación.
  2. Tener en cuenta el número de comensales y de comidas.
  3. Revisar la despensa y el frigorífico y hacer una lista con lo necesario para evitar comprar caprichos.
  4. Comer diariamente frutas y verduras preferentemente frescas.
  5. Introducir alimentos que aportan hidratos de carbono (patata, arroz, pasta, etc.) en cada comida principal.
  6. Tener en cuenta las legumbres: aportan gran cantidad de nutrientes beneficiosos, son versátiles y muy económicas.
  7. Elegir alimentos con fibra: cereales integrales, legumbres, verduras, hortalizas y frutos secos.
  8. Dejar la sal en el salero. Introduce el uso de hierbas aromáticas, apio, vinagre o especias, para añadir más sabor a las comidas.
  9. Prever recetas con pescado 3 a 4 veces a la semana.

La organización no debe ser una estructura férrea e inamovible, pero tener en cuenta las ingestas diarias y contemplar los ingredientes que sí o sí deben estar presentes en cada comida ayuda a mejorar nuestra forma de alimentarnos. Igualmente, las listas y la organización de los menús diarios son claves para ganar tiempo y no tener que cocinar, ni comer, con prisas. 

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