El Colmado, de todo y para todos en Montecanal

El barrio de Montecanal cada vez cuenta con un abanico más amplio de propuestas gastronómicas. El último proyecto que ha abierto es El Colmado, de la mano de dos jóvenes emprendedores, los hermanos Javier y Belén Fernández Bressel, con experiencia en el sector, y del cocinero Javier Nadal.

La elección del nombre no es casual. Evoca la imagen de las tiendas de ultramarinos de antes, de las que ya quedan pocas. La idea es que en El Colmado uno encuentre casi de todo desde el punto de vista gastronómico. Además, para un público amplio: desde familias con niños a parejas o grupos de amigos de todas las edades.

El escenario se adapta perfectamente a esa demanda potencial. En la amplia zona de cafetería se acomodan una docena de curiosas mesas. No son altas ni tampoco clásicas. Su tamaño es intermedio. Los taburetes, por lo tanto, se adaptan a esa altura media. Son muy cómodos y recuerdan a los que hace unos cuantos años había en los colegios.

Para complementar esta zona hay un comedor con capacidad para alrededor de 40 personas. De momento, en el mes que lleva abierto El Colmado, este espacio ha acogido comidas y cenas de grupos y algunos eventos. Para una estancia sin prisas, sobre todo el fin de semana, es un escenario muy acogedor. Especialmente, una mesa española cuadrada para 12 personas, que se eleva sobre el resto, y a buen seguro va a ser una de las más demandadas.

La carta y un menú del día semanal (14,90 euros) son las dos propuestas con las que ha iniciado su andadura. En el menú ya se anuncian las intenciones de la cocina. Con él se intentan marcar diferencias, crear una seña de identidad y, de alguna forma, mostrar el camino hacia la carta.

Las presentaciones están cuidadas y el recetario ofrece un interesante punto de elaboración alrededor de salsas y preparaciones reconocibles: el bacalao skrei, a la bilbaína; el lomo de ternera, al estilo Strogonof, o el ‘roast beef’, con patatas Café París. Habitualmente, se incluye algún plato de carta, como las carrilleras deshuesadas en salsa española, con un pequeño suplemento, para dar a conocer el nivel de la cocina.

La carta ofrece interesantes detalles. Para abrir boca, por ejemplo, las salmueras con su vinagrillo de vodka. Los tres quesos de la tabla que se propone están muy bien seleccionados: Sansueña zamorano; Bejés-Treviso azul, más conocido como queso Picón, y de Gabás, del Valle de Ossau.

Productos de calidad

La causa limeña, un plato típico de la cocina de peruana, puede ser un buen entrante antes de adentrarse en otras referencias principales. Los tatakis, de atún rojo Balfegó certificado y de chuleta prémium, muestran la calidad de las materias primas con las que se trabaja.

Aunque el recetario es tradicional, se apuesta por presentaciones que no son habituales, como la tagliata di Manzo. El corte del entrecot es un poco más grueso que el de un carpaccio clásico. Sale a la mesa caliente, aunque en Italia se sirve templado, con una base de rúcula y parmesano por encima.

Varias ensaladas, productos de temporada como alcachofas o habitas baby; merluza de pincho y chipirones, como principales pescados, o tournedó de solomillo, entre las carnes más selectas, completan una carta que culmina con unas cuantas propuestas lamineras: tocinillo de cielo, trufas caseras, torrija con sus cosas...

El Colmado

Avenida de la Ilustración, 5. Zaragoza. Teléfono: 689 963 710. Horario: martes a sábado, de 12.30 a 16.30 y de 20.00 a cierre. Domingo de 12.30 a 17.00. Descanso: domingo noche y lunes, cerrado.Ir al suplemento de gastronomía