El restaurante Cobarcho es un clásico de Jaca que hace unos meses cambió de dueños y de orientación, pero eso sí, manteniendo la esencia de lo que siempre fue. En el apartado estético la transformación ha sido absoluta. Más luminoso, más amplio, más cómodo... Con unas grandes cristaleras que miran a la calle y que acercan a los potenciales clientes.

El mobiliario es moderno y funcional, pero además de estos detalles decorativos se ha creado una nueva zona de cafetería con carta de tapas y raciones, así que las posibilidades gastronómicas también han crecido. Además, la brasa, que siempre fue protagonista en Cobarcho, ahora ha cambiado de ubicación y prácticamente se puede ver desde cualquier rincón de la sala, eso sí, bien protegida para que el humo no moleste.

A pesar de todos estos cambios, el recuerdo de una cueva y de las pinturas rupestres sigue estando presente en varios rincones. Es lo que evoca el logo del ciervo y el cazador, que enlaza con la dilatada trayectoria del antiguo Cobarcho.

Buena parte del anterior equipo también continúa en el restaurante, pero al frente ahora están Alberto Sánchez, en la cocina, y Rocío Echevarría, en la sala. Alberto es jacetano y a pesar de su juventud tiene una amplia experiencia en los fogones. Su sello lo va introduciendo poco a poco, pero ha tenido muy claro que el nuevo Cobarcho debía mantener recetas tan exitosas como la sartén de migas altoaragonesas con su huevo frito o el bacalao ajoarriero.

Las nuevas presentaciones han ganado en vistosidad en el plato. Es el caso de la ensalada de hortalizas al horno con pulpo y ajada gallega o de la crema de mango caramelizada con helado de vainilla. El menú del día también recoge una gran variedad de propuestas como la ensalada oriental con untuosa salsa casera o la premiada y reconocida garbure (sopa de verduras de los Pirineos franceses).

La calidad de la carne es excepcional, especialmente el chuletón, el entrecot y el solomillo de vaca de Txogitxu, que se elaboran a la brasa. En cuanto a los guisos, llama la atención el de ciervo, macerado durante tres días con vino tinto del Somontano, ciruelas, pasas y orejones. Tanto el ternasco como el cordero lechal de Aragón están presentes y tampoco falta un guiso típico de Huesca como el pollo de corral al chilindrón. Además, la mayoría de los pescados se preparan a la brasa. Lo dicho, un gran cambio sin olvidar los orígenes.

Cobarcho

Dirección: Ramiro I, 2. Jaca (Huesca). Teléfono: 974 363 643. Horario: de 12.00 a 17.00 y desde las 20.00. Descanso: domingo noche y lunes, cerrado.- Ver otros restaurantes recomendados

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