Los mandamientos de la dieta mediterránea, ¿los cumples?

España es, junto a otros cinco países europeos, uno de los precursores de esta forma de alimentación tan saludable, pero aquí no siempre cumplimos sus preceptos.

Las grasas saludables y los cereales son las bases de la dieta mediterránea.
Las grasas saludables y los cereales son las bases de la dieta mediterránea.
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La dieta mediterránea es, además de deliciosa, una de las joyas nacionales por excelencia, pues ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, junto a otros manjares como los espetos. Además, no solo se basa en ingredientes de calidad y saludables, sino que conforma un auténtico estilo de vida relacionado con grandes beneficios para la salud. Sin embargo, muchas personas no consumen a diario alimentos de los cinco grupos que conforman esta dieta milenaria, desaprovechando las grandes materias primas de las que podemos disfrutar en nuestro país.

¿Consume a diario productos de la dieta mediterránea?

El aceite de oliva es la base de todo. Es una de las grasas culinarias más saludables y se le relaciona con múltiples beneficios para nuestro organismo, como, por ejemplo, la reducción de riesgo de cardiopatías. Frutas y verduras, a diario. Consumir más de cinco porciones al día es lo recomendable, pero cuantas más, mejor. Además, es importante recordar que, antes de los invernaderos, cada fruta crecía de forma natural en unos meses concreto, y que saber disfrutar de ellas a su debido tiempo es mucho más saludable. Los cereales no engordan, son esenciales. El 55% del aporte calórico total de la dieta debe provenir de las legumbres, la pasta, el arroz, las patatas... Por eso, seguir dietas que eliminan o reducen en exceso su ingesta puede ser muy perjudicial. Eso sí, si se quiere una versión más saludable, en la compra se puede decantar por los cereales integrales, ya que ayudarán a mantener el peso equilibrado si se tiene una vida sedentaria.  Carnes y pescados, pero sin abusar. Las proteínas son esenciales en la dieta, pero no son, ni mucho menos, el pilar básico de nuestra alimentación, por eso hay que evitar abusar de ellas y disfrutarlas tan solo una vez al día y, a poder ser, a la plancha y regadas con aceite de oliva crudo. Los huevos y la leche, siempre presentes. Aunque los lácteos y los huevos han estado en numerosas ocasiones salpicados por bulos alimentarios, es importante consumirlos, al menos, una vez a la semana, en el caso de los huevos, y a diario, si se habla de yogures y quesos. Ir al suplemento de gastronomía

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