Si comes en 'tupper', deberías seguir estos consejos

Es económico, rápido y te soluciona la comida entre semana. El 'tupper' se ha convertido en un compañero muy habitual para todas aquellas personas que, durante la semana, comen en el trabajo. Es cierto que ninguno está tan rico como los que prepara madres y abuelas reparten con gran cariño, pero conviene hacer un esfuerzo para que comer fuera de casa no sea sinónimo de alimentarse mal. Siguiendo los siguientes consejos, es probable que tu dieta semanal sea mejor y más saludable.

La cantidad correcta. Si aprovechas comer de 'tupper' para comer menos y controlar la dieta entre semana, debes saber que un recipiente más pequeño no es la solución, ya que esto provocará que piquemos entre horas con mayor frecuencia.  Un poco de todo.  La pasta, las ensaladas o los alimentos ya preparados (como las legumbres de bote) son una opción muy rápida para llenar el 'tupper' que mañana llevarás a tu oficina, pues se preparan rápido y sin gran dificultad. No obstante, hay que tirar de imaginación y variar un poco la dieta: un salteado de setas, un puré de verduras, unas cremas frías o unos huevos rellenos también son sencillos de preparar y ayudan a variar nuestra dieta. Además,  no hay que olvidarse de las proteínas: una pechuga de pollo o un poco de atún pueden ser el acompañante perfecto. Hay vida más allá de los restos. Típico: el fin de semana hiciste comida para un regimiento y tienes restos para comer cuatro días más. Es cierto que no hay que tirar comida, pero ciertos alimentos pierden su valor nutricional, por lo que es preferible prepara algo rápido por la mañana o la noche anterior a comer algo que lleve cuatro días en la nevera. Con toda esa comida que te ha sobrado, siempre puedes preparar alguna receta de aprovechamiento. Comemos por los ojos. Aunque tu estómago lleve una hora reclamando esa deliciosa comida que te has preparado, el sentido de la vista también tiene un papel importante. En la medida de lo posible, hay que intentar que la comida sea visualmente apetecible, ya que esto influye en la digestión. Una buena opción para ello es recurrir a los 'tuppers' que tienen varios compartimentos o apuntarse a la moda de 'comer en tarro'. No solo hay que tener en cuenta lo que comemos. El 'tupper' también tiene una vida útil limitada, por lo que conviene cambiarlo cada cierto tiempo. Aunque se limpie a conciencia, no hay que olvidar que está sometido a cambios de temperatura y que los olores terminan impregnándose en el recipiente. Además, conviene utilizar de cristal, pues se limpian más fácilmente. 

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