Pepe Rodríguez: los cocineros y periodistas debemos dejar "un poso en la sociedad"

El cocinero, famoso por ser jurado en 'Masterchef', ha hablado sobre el periodismo gastronómico.

Pepe Rodríguez puede presumir de una estrella Michelin
Pepe Rodríguez: los cocineros y periodistas debemos dejar "un poso en la sociedad"
Roberto Garver

El cocinero Pepe Rodríguez, con una estrella Michelín y conocido por su participación en el programa de televisión "Masterchef", considera que la misión de los restauradores y los periodistas gastronómicos es "dejar un poso en la sociedad" sobre el concepto de "comer bien".


Rodríguez, responsable del restaurante El Bohío en Illescas (Toledo), fue uno de los ponentes en las Jornadas Futuro en Español, en Logroño, en donde se ha referido a la "explosión" del periodismo gastronómico.


Algo que él cree que "no es de ahora" porque "periodistas que trabajen sobre gastronomía hay los mismos que hace quince años" y "críticos gastronómicos cada vez hay menos", ha asegurado en declaraciones a Efe.


Sin embargo, sí que reconoce que "cada vez se habla más de gastronomía" porque "tiene tirón, como todo lo relacionado con el buen vivir, el buen comer, el buen beber y el buen dormir".

"Ahora estamos en un momento de parón, por la crisis, pero hay que darse cuenta de que los países más desarrollados son los que han tenido una gran gastronomía", ha explicado.


Cree que ahora, en España, hay más cultura de comer bien, de cuidarse, de invertir en eso y "cuanto más rápido se avance en esa línea, mejor".


Y ha defendido que los cocineros españoles "ya eran conocidos y reconocidos antes", pero la televisión "los ha acercado a la sociedad".

"Solo para que pase por mi restaurante el diez por ciento de la gente que ve el programa, medio millón de personas, hacen falta quince años", mientras que "Masterchef" ha logrado audiencias de cinco millones de espectadores, ha relatado.

Rodríguez ha considerado que los cocineros hace tiempo que comprendieron que era necesario salir de las cocinas, explicar a las personas su trabajo, "desmitificarlo y democratizarlo".


La otra profesión de la que habló, la del crítico gastronómico, también ha cambiado gracias a la difusión al público de la alta gastronomía, ha precisado.


"Antes, el crítico era Dios, nunca tuvieron que serlo, pero habían tomado el poder mundial, aunque no tienen derecho a estar por encima del creador, el cocinero, como tampoco lo están en otras disciplinas", ha explicado.


De hecho, ha asegurado, "hay periodistas que han hundido negocios y estaban contentos por ello, porque estábamos, y en cierta medida seguimos así, en la mano de personas que tienen copado el 'lobby' de la transmisión gastronómica".


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