En Madrid

Un bombón de melón con jamón y un Goya dulce inauguran el Salón del Chocolate

El maestro chocolatero Justo Almendrote ha sorprendido un año más con sus originales creaciones en el X Salón del Chocolate de Madrid. Habrá catas, degustaciones y talleres para los más golosos hasta el próximo domingo.

Habas de cacao en la recreación de una plantación de cacao en el centro de Madrid
Un bombón de melón con jamón y un Goya dulce inauguran el Salón del Chocolate
SALON DEL CHOCOLATE

Un bombón de melón con jamón, una bola del mundo y un Goya de chocolate han sido las creaciones dulces con las que se ha inaugurado el X Salón del Chocolate de Madrid, que se celebra hasta el próximo domingo con catas, degustaciones y una serie de propuestas irresistibles para los golosos.


El maestro chocolatero Justo Almendrote ha sorprendido un año más con sus originales creaciones, con un bombón de melón con jamón como producto estrella que ha creado gran expectación entre los visitantes del salón, abierto al público en un centro comercial de Madrid (Moda Shopping) hasta el próximo domingo.


Almendrote, que tiene el récord Guiness por haber creado la escultura de chocolate más alta del mundo, ha diseñado este pequeño bocado dulce a base de una "garnache" de melón que busca sorprender por el paladar y la nariz, "muy aromática", rellena de aceite de oliva y con un chocolate mezclado con jamón en polvo.


"Siempre he intentado hacer algo nuevo, pero hay que mezclar siempre con criterio. No todo combina con todo, pero sí hay sabores que quedan muy bien", ha subrayado el pastelero.


El salón del chocolate es una ocasión para contemplar la primera plantación de cacao de Madrid, recreada con la colaboración de la Comisión Nacional del Cacao de la República Dominicana, y en la que el visitante puede aprender cómo se extrae el cacao desde la mazorca o cuáles son las diferencias entre el chocolate criollo, el forastero y el trinitario.


También se exhiben utensilios que han formado parte de la historia del cacao, como el metate, que hace 500 años servía a los aztecas para moler las habas del cacao, las barrocas Mancerinas, utilizadas para servir el alimento, u otros más recientes como el molinillo actual.


Además de espacios para la degustación y la cata, el Salón ofrece la oportunidad de participar en talleres didácticos previa solicitud de plazas o asistir a clases magistrales como la que impartirá Justo Almendrote el próximo sábado, sobre los secretos de una buena mousse de chocolate blanco y orujo.


"La gente lo primero que quiere es probar cosas nuevas y también aprender", ha destacado el pastelero, también conocido por esculpir treinta y siete réplicas del busto de Goya para la edición de los premios del cine español de 2008, una de ellas expuesta este año en el Salón.


El evento ofrece además la posibilidad de acceder a una amplia gama de productos hechos a base de cacao, aunque, para poder degustarlos con todas sus propiedades, la correcta conservación en el hogar es fundamental.


"La clave para disfrutar del chocolate es que esté a la temperatura correcta, siempre sobre los 18 grados y nunca en nevera, porque pierde muchas cualidades".



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