Restaurante

Durán 5: menús caseros, variados y para llevar a casa

Cocina casera y brasa para dar forma a dos menús con una amplia variedad de propuestas que los clientes también se pueden llevar a casa.

Comedor del restaurante Durán 5, en el barrio del Arrabal zaragozano
Caseros, variados y para llevar a casa
ALMOZARA FOTOGRAFIA

Tres años lleva el restaurante Durán 5 manteniendo el precio del menú de diario (9 euros), aguantado el tirón de la subida del IVA, de la luz, de las materias primas… Es la misma historia que se repite en tantos establecimientos, pero que en la periferia de una ciudad como Zaragoza se vive con especial intensidad. Hay menos obras, la actividad en los polígonos ha bajado, los comercios y las oficinas bancarias también flojean, así que muchos de esos clientes potenciales han ido desapareciendo. 


Ante esta realidad, establecimientos como Durán 5 han apostado por intentar no reducir la oferta de su menú de diario, que en este caso se concreta en siete primeros platos y en otros tantos segundos que cambian todos los días. Ahora que llega el calor, se incluyen más propuestas frías que recetas calientes, como la ensalada de pollo y piña con salsa rosa o el gazpacho andaluz casero con guarnición, pero sin dejar de lado un clásico de los jueves en este establecimiento como es el cocido montañés, que está todo el año


La brasa, que se enciende a diario, le otorga un valor añadido a la cocina del Durán 5, de forma que siempre hay propuestas que se hacen sobre la parrilla, como el combinado de embutidos frescos, los muslos de pollo con salsa barbacoa e incluso, en ocasiones, se ofrece una parrillada de pescados.


El viernes por la noche, durante todo el sábado y el domingo a mediodía, el protagonismo gastronómico llega de la mano del menú de fin de semana (17,50 euros) en el que aparecen muchos platos de la carta y que, de alguna forma, puede tener esa consideración, la de una carta a precio cerrado, ya que se puede elegir entre una docena de primeros platos y prácticamente 20 segundos. El nivel de las materias primas sube, igual que el de las elaboraciones que, por ejemplo, llegan en forma de pastel de marisco con espárragos trigueros y salsa de piquillos, risotto de setas, ensalada de bacalao desmigado o patatas cocidas con langostinos y sardina rancia.


Entre los segundos, el ternasco de Aragón asado al horno con patatas a lo pobre y los caracoles a la brasa (suplemento de 7 euros) son dos de las referencias estrella de la casa. Sin embargo, entre tanta variedad, también hay para elegir platos diferentes como el cochinillo confitado, cocinado con sidra y canela, un golpe de horno y presentado con una sopa de mango, o el muslo de pato en confit con sopa de naranja


Desde hace unos meses, además, estos dos menús se los pueden llevar los clientes a casa. El primer y el segundo plato se entregan en un envase especial al precio de 6 euros el de diario y de 12 el del fin de semana. Lo dicho, una alternativa más para hacer frente a estos tiempos de dificultades.


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