Tercer Milenio

En colaboración con ITA

Un centro de divulgación de la ciencia

SINGULARIDAD

Agustín Camón, del ICMA, lanza una propuesta audaz: dejar a un lado la idea de hacer un museo de la ciencia en el sentido clásico y poner en marcha un centro de divulgación científica. “Su núcleo fundamental sería un programa de actividades y un buen equipo de divulgadores (entre ellos estudiantes becados), personas entusiastas haciendo experimentos atractivos y encandilando a la gente”, propone.


Durante la semana, las actividades irían básicamente dirigidas a centros de enseñanza, “para apoyar las materias que se estuvieran impartiendo en cada momento”. “Bien coordinado desde la Consejería de Educación, el lleno absoluto está garantizado”, asevera. Los fines de semana y festivos se programarían actividades dirigidas al público en general, “abordando temas de actualidad junto a otros encaminados a aumentar la cultura científica de los ciudadanos”. Otra de las ideas es ofrecer colonias de verano para niños y jóvenes.


“También podría haber una pequeña exposición permanente y disponer de un espacio para traer exposiciones temporales (mucho más interesantes que las permanentes)”, en su opinión. A medio plazo, “lo deseable sería que nuestro centro fuera capaz de montar y ofertar también sus propias exposiciones”. A su modo de ver, se podría considerar alguna exposición fija de tipo divulgativo, pero nunca colecciones. “Por ejemplo, Instrumenta –instrumentos científicos que se exhiben en la facultad de Ciencias- es una colección fantástica pero que está muy bien donde está”.


pioneros en i+d+i Con el tiempo, “el objetivo sería convertirse en un centro pionero a nivel mundial de I+D+i en divulgación, una actividad que podría convertirse en fuente de autofinanciación, generando patentes y diseñando, fabricando y vendiendo productos de divulgación, cada vez más demandados -explica; así como en un centro de formación de divulgadores, único en el mundo, que contase con créditos de la Universidad de Zaragoza e impartiese, por qué no, un máster en divulgación científica”.