El PP, con el actual presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, se ha quedado a un procurador de lograr la mayoría absoluta en las Cortes de Castilla y León, que la marcan los 43 parlamentarios, con el 99,27% del voto escrutado, en un Parlamento que pasa de tres a cinco grupos parlamentarios.

El PSOE se mantiene como la segunda fuerza más votada, con 25 procuradores, cuatro menos que en 2011; seguido de Podemos, irrumpe con diez parlamentarios, y de Ciudadanos que logra cinco, con lo que todos tendrían grupo propio, mientras que IU y UPL mantienen su respectivo representante, que seguirán en el grupo mixto.

El PP ha logrado 506.832 votos, 232.670 menos que en el 2011, y en puntos porcentuales ha pasado de un apoyo del 51,55 al 37,81, que supone 13,74 puntos porcentuales menos que hace cuatro años.

La pérdida de la mayoría absoluta ha sido una sorpresa para el PP ya que todas las encuestas, incluida la del CIS, daban a esta Comunidad como una de las pocas en las que los populares mantenían su mayoría absoluta.

Herrera iba a por su cuarta mayoría absoluta y ha estado a punto de conseguirlo ya que en los últimos votos escrutados los resultados han bailado de 41 a 43 escaños. Esto al 98,87% de los votos escrutados.

El PSOE ha logrado 347.422 votos, 78.355 menos que hace cuatro años, y ha reunido un apoyo del 25,92%, 3,76 puntos porcentuales menos que en 2011.

Podemos logra un 12,10% de apoyo, con 162.257 votos; y Ciudadanos 137.986, un 10,29%.

Desde el PP, el candidato a la reelección, Juan Vicente Herrera, ha afirmado este domingo que la pérdida de la mayoría absoluta "no es un buen resultado para él, pero su partido "puede sentirse satisfecho" y formará un "gobierno coherente con acuerdos".

En su segunda comparecencia ante la prensa, con el 96,93% del voto escrutado y con un resultado de 42 procuradores para el PP, sin mayoría absoluta, Herrera ha considerado que en términos comparativos se trataba de "un buen resultado" porque "mantiene una notable diferencia" con sus perseguidores, aunque no por el que habían trabajado en los dos últimos meses.

"La pérdida de la mayoría absoluta no es un buen resultado para Juan Vicente Herrera, pero el PP de Castilla y León puede sentirse satisfecho con este resultado", ha expresado el dirigente popular.

Por su parte, el candidato del PSOE a la Junta de Castilla y León, Luis Tudanca, ha considerado hoy que los ciudadanos de la Comunidad han decidido hoy "dar una oportunidad al cambio" y ha asegurado que el "hecho histórico" es que el PP habría perdido la mayoría absoluta con el 97,57% escrutado.

En una rueda de prensa, Luis Tudanca ha considerado que los ciudadanos hoy "han votado cambio por primera vez en veintiocho años y eso es importante".

Desde Ciudadanos, el candidato a la Presidencia de la Junta, Luis Fuentes, ha sostenido que los resultados de hoy van a traer a esta Comunidad un cambio y se ha mostrado dispuesto a pactar con otras formaciones sobre la base de propuestas concretas.

El candidato de Podemos a la Presidencia de la Comunidad, Pablo Fernández, ha defendido que "estas elecciones autonómicas marcarán un antes y un después en la política de esta Comunidad", y que su partido está "satisfecho" aunque su aspiración siempre es "ganar".

"Es un momento histórico que supone el principio del fin del bipartidismo en este país y el cambio se ha hecho tangible en Castilla y León y ya es irremediable, habrá un antes y un después de estas elecciones", ha reflexionado.

El candidato del IU-Equo a la Presidencia de Castilla y León, José Sarrión, ha resaltado, por su parte, el buen resultado de las "candidaturas de convergencia, de unidad popular", en la Comunidad, de las que forma parte su partido, y que incluso podrían conseguir la alcaldía de Zamora.

Las elecciones municipales también han dejado un mapa inédito en Castilla y León, después de que el PP haya perdido las mayorías absolutas con las que mantenía las capitales de Valladolid, León, Burgos, Salamanca, Ávila, Palencia y Zamora, mientras que el PSOE mantiene sus feudos de Soria y de Segovia, este con necesidad de apoyos, con la irrupción de Ciudadanos y las candidaturas de unidad popular.

Las elecciones municipales del 24 de mayo han dejado Ayuntamientos en los que se han multiplicado el número de fuerzas y con un voto muy fragmentado que obligará a los pactos para buscar gobierno en la mayor parte de las alcaldías de las capitales de provincia.

La sorpresa ha sido la tónica de la noche desde los primeros porcentajes de voto escrutado en los que alcaldes emblemáticos del PP como Javier León de la Riva, en Valladolid, o Alfonso Fernández Mañueco, en Salamanca, veían peligrar sus holgadas mayorías de 2011, como han confirmado los escrutinios finales