El 91% de los establecimientos rurales se adapta al nuevo Decreto de la Junta

?De los 361 alojamientos de la provincia, son 34 los que "han cerrado o son ilegales" desde el 22 de diciembre.

Una casa rural en la localidad de Somaén
Una casa rural en la localidad de Somaén
Mariano Castejón

Un total de 327 establecimientos de turismo rural de la provincia, lo que supone un 91% del total, se han adaptado a la nueva regulación del sector llevada a cabo por la Junta de Castilla y León y que incluye un sistema de categorización por estrellas verdes otorgadas en función de los servicios que ofrezcan y de sus características. Así, de los 361 alojamientos con los que contaba Soria a mediados de diciembre, solo 34 no se han adherido a la nueva norma y, por tanto, han dejado de tener la condición de alojamientos turísticos y no podrán ejercer esta actividad, según especificó a HERALDO la Consejería de Cultura y Turismo del Gobierno regional. El porcentaje en la provincia sigue la misma línea que el de la región, donde de los 4.121 establecimientos -que comprenden casas rurales, hoteles y posadas- que había a finales de año, han sido 3.548 los que regularizaron su situación en el plazo establecido (86%).


En febrero de 2013 la Conferencia Sectorial de Turismo acordó estandarizar la nomenclatura de los alojamientos rurales a nivel nacional con las estrellas para la comercialización, promoción e internacionalización del turismo rural. Castilla y León tomó entonces la delantera y lo incluyó en su ámbito normativo mediante el Decreto 75/2013, de 28 de noviembre, por el que se regulan los establecimientos de alojamiento de turismo rural. Según la norma, antes del 3 de marzo de 2015 todos los establecimientos que estuviesen inscritos en el Registro de Turismo de la región debían presentar esta categorización. No obstante, a mediados de febrero se decidió su ampliación hasta el 21 de diciembre con el fin de que dichos alojamientos pudieran optar a las ayudas para las reformas u obras convocadas por la Consejería de Cultura y Turismo, cumplir con mayores requisitos y optar a una categoría superior.


Con dicho Decreto desaparecieron los CRAC (Casa Rural de Alquiler Compartido) y los CTR (Centro de Turismo Rural), por lo que, de los 327 establecimientos con esta nueva categorización en Soria, la mayoría, 272, son casas rurales, seguidas de los hoteles rurales, 41, y las posadas, 14.


En cuanto a las razones de la no inscripción del resto de los 34 alojamientos, los cuales "es muy posible que hayan cerrado", podrían aducirse a "la finalización del ‘boom’ del sector turístico que comenzó hace ahora unos 10 o 15 años", explica Chema Muñoz, consultor especializado en turismo rural. El mismo auge que hizo que proliferasen este tipo de alojamientos aupados por "subvenciones provenientes de fondos públicos europeos". Así, según Muñoz, la aplicación del Decreto habría servido "como una especie de filtro" en consonancia con la intención de la Junta de que, más allá de mantener o incrementar el número de alojamientos, continuaran aquellos establecimientos "que se adecuaran a los estándares de calidad que demandan los turistas".


En cualquier caso, las mismas fuentes regionales consideran que el número de alojamientos de turismo rural que se mantienen "excede, en gran medida, de las expectativas del propio sector" y recuerdan que la Federación de Asociaciones Castellano y Leonesas de Turismo Rural (Acaltur), que siempre ha apoyado la exigencia de requisitos de calidad y profesionalidad de los establecimientos de turismo rural, "nunca previeron que fueran tantos los alojamientos que se categorizaran y pudieran seguir prestando sus servicios". En la provincia, sin ir más lejos, el sector apuntaba a principios de diciembre a que se habrían adherido a dicho Decreto un 80% del total, aunque confiaban en que al filo del plazo pudiera aumentar algo, como así ha sido. De hecho, según los datos publicados por la Junta a mediados del último mes de 2015, de los 361 establecimientos solo 301 habían pedido su categorización.Las estrellas verdes

La categorización mediante estrellas verdes ha sido una de las medidas más novedosas del Decreto. Estos símbolos, para cuya consecución se evalúan aspectos como el entorno, la situación, la accesibilidad, la estructura o el acondicionamiento, conviven así con el sistema anterior de categorización por espigas, creado por la Asociación Nacional de Turismo Rural.


"Son como las estrellas de los hoteles, de una a cinco", y permiten al cliente conocer "de un golpe de vista los servicios y características del alojamiento", explica Dionisio Martínez, presidente de la Asociación de Turismo Rural de Soria Tursoria. Además asegura que es importante que el cliente "sepa a dónde va y, sobre todo, que se cumplan sus expectativas para que quiera volver".


En cualquier caso, y aunque el sector es consciente de que quedan temas por atar, como una mayor profesionalización, y de que la nueva norma "es mejorable en algunos aspectos", Martínez explica que están "contentos porque al menos se ha hecho una estandarización, unas normas específicas para el turismo rural".Hasta 90.000 euros de multa

Una vez concluido el plazo de adecuación a esta categorización, todo aquel establecimiento que no lo realizó -los 34 en Soria- fueron dados de baja en el Registro de Turismo de Castilla y León al día siguiente, el 22 de diciembre. No obstante, la Consejería advierte de que pueden presentar "una nueva declaración responsable para ejercer la actividad de alojamiento de turismo rural".


Es decir, que el hecho de que se acabara ese periodo de adaptación no excluye al resto de alojamientos que quieran más adelante comenzar o continuar la actividad. En este sentido, las mismas fuentes aclaran que si siguen ejerciendo la actividad, una vez que se hayan dado de baja en el registro, y por lo tanto no cuenten con la preceptiva declaración responsable, "se sancionará como infracción muy grave, que lleva aparejada una sanción que puede ir de 9.001 a 90.000 euros".

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión