El 45% de los accidentes por animales salvajes se registra en vías de titularidad estatal

El Gobierno especifica que 35 personas han resultado heridas desde 2006 por este tipo de siniestralidad en las carreteras sorianas.

Señalización de la posible presencia de animales en el tramo de la A-15 entre Almazán y Medinaceli.
Señalización de la posible presencia de animales en el tramo de la A-15 entre Almazán y Medinaceli.
Luis Ángel Tejedor

Casi la mitad de los accidentes provocados por animales se registran en carreteras de titularidad estatal. Así lo desvela el Gobierno a través de una respuesta parlamentaria al diputado del PSOE por Soria Félix Lavilla. El Boletín Oficial de las Cortes de Generales indica que entre 2006 y 2014 se produjeron 5.669 siniestros de este tipo que generaron daños en vehículos. De ellos, 2.586, el 45%, acaecieron en carreteras de propiedad del Estado. En 2.213 casos, en la red regional y en 845 en la provincial. Los 25 restantes ocurrieron en otro tipo de vías como pistas forestales o de titularidad privada.


El Gobierno computa durante los nueve años analizados 9.417 sucesos con daños materiales en las carreteras. En el 60% de los casos estuvo implicado un animal silvestre. Por otro lado, el Ejecutivo central concreta que hasta 1.890 personas han resultado heridas en los últimos nueve años en accidentes de circulación. El 2% referidos a siniestros con corzos, ciervos o jabalíes. Entre 2006 y 2014 hasta 35 personas han tenido que ser atendidas por los servicios sanitarios por sufrir un accidente debido a la irrupción de un animal silvestre.


En la respuesta parlamentaria al socialista, el Gobierno señala que ante los accidentes causados por la invasión "repentina e inopinada" de animales salvajes en las carreteras, el Ministerio de Fomento "efectúa actuaciones transversales, consistentes en un seguimiento de las zonas donde acontecen mayor número de accidentes motivados por esta causa, efectuándose medidas preventivas tales como instalación y colocación de disuasores de fauna en los bordes de las carreteras convencionales en aquellos tramos donde se han detectado mayor número de accidentes motivados por la invasión de animales salvajes". Asimismo, según agrega la publicación oficial del Congreso de los Diputados, en las autovías y autopistas de nueva creación "se instalan en ambas márgenes los cierres perimetrales que impiden o dificultan la intromisión de animales salvajes en las calzadas de dichas infraestructuras". De igual modo, se crean pasos de fauna "en las ubicaciones propuestas por los estudios de impacto ambiental que conllevan la tramitación de sus respectivos proyectos de trazado y construcción y que se plasman en las Declaraciones de Impacto Ambiental emanadas por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente". Con todo, el problema no se ha solucionado. Dos de cada tres accidentes que se producen en la provincia de Soria están motivados por la presencia en la calzada de un animal.


En materia de regulación, la entrada en vigor el 9 de mayo de 2014 de la nueva Ley de Seguridad Vial trajo consigo cambios sustanciales en lo relacionado con los accidentes por animales. De manera general, el conductor es ahora el responsable del atropello, salvo que sea consecuencia directa de la acción de la caza o por falta de mantenimiento del vallado o la señalización. La disposición adicional novena de la normativa indica que en siniestros ocasionados por atropello de especies cinegéticas en las vías públicas "será responsable de los daños a personas o bienes el conductor del vehículo, sin que pueda reclamarse por el valor de los animales que irrumpan en aquéllas". No obstante, amplía que será responsable de los daños sufridos por personas o bienes el titular del aprovechamiento cinegético o del terreno "cuando el accidente de tráfico sea consecuencia directa de una acción de caza colectiva de una especie de caza mayor llevada a cabo el mismo día o que haya concluido doce horas antes de aquél".


La disposición dice en su tercer y último párrafo que "también podrá ser responsable el titular de la vía pública en la que se produzca el accidente como consecuencia de no haber reparado la valla de cerramiento en plazo, en su caso, o por no disponer de la señalización específica de animales sueltos en tramos con alta accidentalidad por colisión de vehículos con los mismos".