Un falso barrio en la azotea de una fábrica de aviones

Casas y coches de cartón para evitar que Japón atacara las bases de EEUU en la II Guerra Mundial.

Falso barrio en Santa Bárbara que sirvió para camuflar una fábrica de aviones
Falso barrio en Santa Bárbara que sirvió para camuflar una fábrica de aviones

En febrero de 1942, tan solo dos meses después del ataque japonés a la base americana de Pearl Harbor, el ejército estadounidense avistó varios submarinos nipones junto a la costa de California.


Ante el miedo del Gobierno de Washington a un nuevo ataque, o incluso a una invasión, se decidió camuflar las fábricas de armamento más importantes para evitar que fueran objeto de fuego enemigo.


Así comenzó una de las mayores producciones de Hollywood. El coronel John F. Ohmer fue el encargado de llevar a cabo el mandato de sus superiores, y para ello contó con la ayuda de los estudios de cine más importantes de la época como Disney, MGM, 20th Century Fox, Paramount y Universal.


Diseñadores de decorados, pintores, carpinteros, iluminadores y directores de fotografía, todos se pusieron a las órdenes del paisajista Edward Huntsman-Trout, que fue quien diseñó cómo debía camuflarse la fábrica Douglas Aircraft Company de Santa Bárbara, en la que trabajaban más de 30.000 personas y cuyos aviones serían decisivos para la victoria del bando aliado.


El techo de la fábrica se conviritó en tan solo unas semanas en un típico barrio norteamericano con sus casas, jardines, colegios y edificios públicos. Incluso se llegó a contratar a actores para que fingieran vivir en este falso barrio.


Los aviones que sobrevolaban la zona eran incapaces de identificar las bases, almacenes y fábricas por lo que pronto se ordenó el mismo tipo de camuflaje en otros complejos como el que Boeing tenía en Seattle, de más de 26 hectáreas.