LOS ASISTENTES

Un acto sin dirigentes sindicales

Al acto de ayer acudieron representantes de varias de las empresas más importantes del país, varios miembros del Gobierno y profesionales del mundo académico.

Un acto sin dirigentes sindicales
Un acto sin dirigentes sindicales
áNGEL DíAZ/EFE

El ex jefe de la Reserva Federal (Fed) de Estados Unidos y asesor del presidente Barack Obama, Paul Volcker, fue ayer el invitado de honor en la presentación del Informe Económico 2010 celebrada en el palacio de la Moncloa, donde llamó la atención la ausencia de los dirigentes sindicales.


Por cuarto año consecutivo, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, presentó ante los principales empresarios del país el informe preparado por su Oficina económica con el balance del año y las perspectivas de futuro, un acto al que decidió invitar al economista estadounidense para contar, como dijo, con su valoración y consejo.


Según apuntaron fuentes del Ejecutivo, Zapatero, que ya se entrevistó con Volcker el pasado septiembre en Nueva York, tenía previsto almorzar después con el asesor de Obama, que realiza una gira europea, y aprovechó la ocasión para invitarle a la presentación del informe.


La asistencia al evento fue numerosa, pero faltaron los líderes sindicales Ignacio Fernández Toxo (Comisiones Obreras) y Cándido Méndez (UGT), quienes, según fuentes de sus respectivas organizaciones, tampoco participaron en este acto en 2009. En esta ocasión, sin embargo, no enviaron a ningún representante de sus organizaciones, algo que sí hicieron en 2009, cuando acudieron a la Moncloa sus secretarios de Acción Sindical. "No había dirigentes disponibles, porque estaban en el comité confederal y no se consideró que fuesen indispensables", apuntaron a este diario fuentes de CC. OO.


Sí estuvieron en el salón de tapices de la Moncloa, lugar elegido para la presentación, los líderes de la CEOE, Juan Rosell, y de Cepyme, Jesús Terciado, así como los máximos representantes de las asociaciones de autónomos.


De bancos y cajas

Acudieron también una buena representación del mundo financiero, como el presidente del grupo Santander, Emilio Botín; el presidente de La Caixa y de la patronal de las cajas de ahorros, Isidro Fainé; o el presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, que se acercaron a saludar a Volcker tras concluir el discurso de Zapatero.


Junto a ellos charlaron y se felicitaron el año los presidentes de la mayor parte de las empresas que componen el Ibex-35, como César Alierta (Telefónica), Antonio Brufau (Repsol), Florentino Pérez (ACS), Baldomero Falcones (FCC) o Antonio Vázquez (Iberia). Todos volvieron a la Moncloa mes y medio después de la reunión organizada por Zapatero para analizar con ellos la salida de la crisis económica.


No faltaron tampoco al acto los máximos responsables de las organizaciones sectoriales de la automoción, el turismo, la construcción, el sector farmacéutico, el agroalimentario o las tecnologías; y los representantes de los principales bancos de inversión que operan en España, como Deutsche Bank, UBS o BNP Paribas.


A la cita acudieron también ex ministros que hoy participan en los consejos de empresas importantes del país, como los ex titulares de Economía socialistas Miguel Boyer y Carlos Solchaga, así como el primer ejecutivo de El Corte Inglés, Isidoro Álvarez.


Por su parte, Rodríguez Zapatero estuvo acompañado por sus vicepresidentes Alfredo Pérez Rubalcaba y Elena Salgado, y por los ministros de Presidencia, Ramón Jáuregui; Trabajo, Valeriano Gómez; Industria, Miguel Sebastián, y Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar.


El fin de la presentación derivó en una curiosa caravana de coches de lujo por los jardines del palacio, donde los chóferes esperaban a los empresarios.