TELECOMUNICACIONES

Telefónica y CMT critican que la política europea disminuya la inversión en las redes de fibra óptica

Los mandatarios de ambas instituciones consideran que la política europea ha alejado el desarrollo de las nuevas redes de generación de otros países co Japón o Estados Unidos, además de generar incertidumbre.

El consejero delegado de Telefónica, Julio Linares, ha dicho que la política de telecomunicaciones de la UE ha reducido las inversiones del sector y frenado el desarrollo de las nuevas redes de fibra óptica, una crítica en la que ha coincidido con el presidente de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT), Reinaldo Rodríguez.


Durante su intervención en la primera jornada del XXIII Encuentro de las Telecomunicaciones de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), organizado por AETIC, Linares ha señalado que ahora es el "momento adecuado" de modificar esa política y de crear un nuevo modelo más flexible, que incentive las inversiones y no esté centrado en los precios.


Linares ha estimado que la regulación de tarifas en itinerancia ("roaming") y precios de terminaciones en móvil de la Unión Europea habría reducido los ingresos del sector en 6.000 millones de euros y 34.000 millones, respectivamente, y habría disminuido en 6.000 millones las inversiones.


Además, a juicio del consejero delegado de Telefónica, la política europea ha alejado el desarrollo de las nuevas redes de generación en Europa de otros países, como Japón o Estados Unidos. La reciente regulación europea, ha añadido, ha generado incertidumbre y ha sido insensible ante la crisis.


Tras la intervención de Linares, el presidente de la patronal tecnológica AETIC, Jesús Banegas, ha reclamado un cambio de modelo regulatorio que no merme la innovación y ha pedido a los políticos que "se metan las manos en los bolsillos y dejen de meterlas en los bolsillos de las telecomunicaciones".


También se ha mostrado crítico con la política comunitaria, el presidente de la CMT, Reinaldo Rodríguez, que la tachó de "demasiado intervencionista" y de haber tenido un efecto desincentivador de las inversiones.


Pese a estas barreras, los ponentes de la primera jornada del principal encuentro del sector coincidieron en señalar las telecomunicaciones y la innovación tecnológica como motor para la recuperación económica.


El consejero delegado de Telefónica se ha mostrado confiado en la fortaleza del sector de las telecomunicaciones, "al que menos le ha afectado la crisis". El reto de las empresas, ha explicado, está en saber con qué rivales deben competir y con quién colaborar. “La crisis no está frenando la revolución tecnológica", ha subrayado Linares, quien ha destacado el potencial que tiene la banda ancha móvil. Junto a esto, Banegas ha destacado la gran oportunidad inversora y de desarrollo que traerán las nuevas redes de fibra óptica.


En la inauguración, la ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, también ha destacado que la recuperación de la crisis y el retorno a la "senda del crecimiento" pasan por mejorar el tejido productivo con conocimiento e innovación.


Además del papel de las telecomunicaciones en la recuperación económica y las críticas las políticas comunitarias, la revisión del sistema impositivo que estudia el Gobierno y la nueva tasa de financiación de RTVE también han suscitado los comentarios de los ponentes.


Tras su intervención, Garmendia ha afirmado que la coyuntura económica requiere una revisión del sistema impositivo para adecuar inversiones y gastos pero que no se tocará la fiscalidad a la I+D+i. En cuanto a la tasa de RTVE, ha señalado que el sector de las telecomunicaciones es "uno de los más potentes" y que parece "razonable" que en estos momentos de dificultad contribuyan a reforzar el esfuerzo innovador.


Linares, en un tono más relajado durante su intervención, ha señalado que lo que le preocupa "es que lo que no ha conseguido lo crisis lo consiga la necesidad impositiva". Por otro lado, el presidente de la CMT ha anunciado que el organismo aprobará este mes una rebaja en los precios que pagan otros operadores por prestar servicios de banda ancha desde las infraestructuras de Telefónica.