AUTOMOCIÓN

Reticencias en Alemania ante el plan de salvación para el automóvil

El ministro de Economía se muestra contrario a dar ayudas especiales al sector.

El ministro de Economía alemán, Michael Glos, se manifestó ayer en contra de un plan estatal de salvación para la industria del motor, que actualmente pasa por dificultades, debidas solo en parte a la crisis financiera internacional. "Creo equivocado empezar a hablar de un gran paquete de salvación para la industria del automóvil", dijo Glos, en declaraciones que publicó ayer la edición dominical del 'Frankfurter Allgemeine'.


Las declaraciones de Glos han producido inquietud en la cancillería pues parecen ir en contra de los planes de Angela Merkel que ha invitado hoy a la cancillería a los directivos de Opel para buscar salidas a la crisis que vive ese fabricante de automóviles.


El vicecanciller, ministro de Exteriores y candidato socialdemócrata a la cancillería, Frank Walter Steinmeier por su parte, ha invitado a los comités de empresa del sector para analizar la crisis.


Glos teme que, si se le ofrece un apoyo especial al sector automotriz, otros sectores reclamen ayudas semejantes. "El estado no puede sustituir la caída de la demanda y eso es algo que es válido para todos los sectores", dijo Glos.


De momento, el centro de las preocupaciones sobre el sector del automóvil está en Opel, que ha pedido una garantía estatal de 1.000 millones de euros para hacer frente a una difícil situación precipitada por los problemas que atraviesa el consorcio matriz General Motors. Sin embargo, en el Ministerio de Finanzas hay el convencimiento que el caso Opel solo es parte de la crisis. Hay temores de que si Opel recibe apoyo del estado alemán, el dinero termine desapareciendo en el presupuesto de General Motors.


Situación en EE. UU.


Por su parte, el sindicato estadounidense UAW descartó ayer hacer más concesiones a la industria del automóvil en EE. UU. Los empleados del sector no tienen la culpa de su descalabro ni harán más concesiones, aunque los tres grandes de Detroit necesitan ayuda, afirmó el presidente del Sindicato de Trabajadores de la Industria Automotriz (UAW), Ron Gettelfinger.


Durante una inusitada conferencia telefónica, Gettelfinger instó al Congreso de EE .UU. a aprobar cuanto antes un plan de rescate de la industria del automóvil, preferiblemente antes de la entrada del nuevo Gobierno.


Consideró injusto que se pida a los trabajadores hacer mayores sacrificios ante la crisis actual porque, a su juicio, se han hecho "cambios drásticos, drásticos", en el marco de las negociaciones de los contratos colectivos pactados el año pasado con las empresas.


Sin embargo, el sindicalista enfatizó que General Motors, Ford y Chrysler, los 'Tres Grandes de Detroit' son parte clave de la economía estadounidense y necesitan una ayuda.