CRISIS

"La psicosis de crisis económica que existe en España no la hay en ningún otro país"

El presidente de las Cámaras pide moderación salarial, rebajar las cotizaciones y abrir la financiación a las pymes.

Javier Gómez-Navarro, presidente del Consejo Superior de Cámaras, fue claro ayer en Zaragoza. "Es evidente que en este país tenemos un problema económico, llámese crisis o desaceleración". El empresario desgranó la lista de peticiones que la institución hace al Gobierno para luchar contra la situación actual, que llega acompañada del pesimismo general. "La psicosis de crisis que hay en España no la hay en ningún otro país", afirmó. En este sentido, solo vio un agravante más en la situación española con respecto a otros países, la crisis del sector inmobiliario. En el caso de Aragón, el presidente de la cámara de Zaragoza, Manuel Teruel, se sumó a las palabras de Gómez-Navarro, pese a reconocer que "el efecto Expo ha mitigado algunos de los síntomas".


El Consejo Superior clausuró el Pleno de la institución celebrado en la capital aragonesa, durante el que sus miembros aprovecharon para visitar la Expo. Los empresarios presentaron un documento con una serie de recetas contra la crisis entre las que incluyeron abrir el grifo a la financiación del sector privado, sobre todo de las pymes. Gómez-Navarro aseguró que "si no se solucionan los problemas tendremos un problema serio de suspensiones de pagos". Así, criticó que las entidades financieras hayan "cambiado radicalmente el criterio de valoración de riesgos" que utilizaban a la hora de conceder créditos a empresas, endureciéndolo.


Contra el absentismo


La siguiente medida que solicitaron las Cámaras fue dirigida directamente al bolsillo de los trabajadores. Para estos y sus representantes el dirigente reiteró la petición de "moderación salarial" que vienen haciendo las patronales. Contrario a las subidas salariales que siguen al Índice de Precios al Consumo (IPC), consideró "demoledores" los convenios firmados en el primer trimestre por encima de la inflación y se mostró partidario de incrementos ligados a la productividad. "O actuamos o tendremos un problema serio de competitividad por falta de productividad", señaló. En este sentido, hizo hincapié en que el absentismo laboral "ha crecido de manera espectacular", lo que impide mejorar la posición de las empresas españolas, e incluso pone en peligro el atractivo de nuestro país para quienes quieran instalarse aquí. Por ello, reclamó la reducción de las ausencias injustificadas al puesto de trabajo, proponiendo que sean las mutuas las que concedan las altas y bajas laborales, en lugar de la Seguridad Social, alegando que "son más rigurosas".


Apoyo a las importaciones


Entre los deberes del Gobierno para mejorar la competitividad, Gómez Navarro incluyó el apoyo a las empresas que se "multilocalizan" en países de bajo coste. "Las instituciones públicas tienen que apoyar la importación de algunos elementos si se quiere ser competitivo en ciertos productos".


A los empresarios les pidió, pese a ser época de vacas flacas, que "reduzcan sus márgenes empresariales". Para hacer más llevadera esta petición, añadió la reducción de las cotizaciones a la Seguridad Social, otro de los aspectos que cree que empieza a restar competitividad a las empresas españolas, ya que "compiten con países emergentes en los que no hay Seguridad Social". El empresario se decantó por evolucionar hacia un modelo en el que la financiación llegue a través de otros impuestos como la subida del IVA, en la línea de las medidas aprobadas en Alemania. Esto permitiría "financiar la Seguridad Social con productos que se consumen en el país pero que se fabrican fuera". En este sentido, aclaró que, de momento, la situación actual se solventaría solo bajando las cuotas y dejó la subida de impuestos para más adelante. Liberalizar la prestación de servicios públicos como la Sanidad y mantener la subvención a las energías renovables cerraron las demandas al Gobierno.