GENERAL MOTORS

Opel acepta la participación en los beneficios

A expensas de que GM dé el visto bueno, la dirección de la filial europea ha dicho sí a que sea a diez años y antes de impuestos.

Imagen de archivo de operarios de la factoría de General Motors en Gliwice (Polonia)
Opel acepta la propuesta sindical de participación en beneficios
REUTERS

Aunque pendiente de que el Consejo de Administración de General Motors lo ratifique, la dirección de GM Europa dio ayer por buena la propuesta de participación de la plantilla en el 10% de beneficios que le presentaron los sindicatos este miércoles en Alemania y que pasa por recibir el 3,75% de las ganancias que tenga Opel antes de impuestos en 2014 y, a partir de ese año, el 7,5% durante cinco ejercicios, siempre que los resultados lo permitan.


Si bien la propuesta inicial del Foro Europeo de Empleados planteaba percibir el 7,5% de las ganancias durante diez años, hasta 2023, ayer aceptaron renegociar estas condiciones transcurridos cinco años, ya que la situación podría haber cambiado mucho para entonces. "Pasados cinco años desde 2014, en que empiecen a revertir los beneficios a los trabajadores, tendremos que volver a hablar del porcentaje, que podrá ser del 7,5% o incluso del 10% en función de cómo evolucione la compañía", explicó Salvador Salas, secretario general de la Federación de Industria de CC.OO Aragón. Por su parte, su homólogo en UGT, Luis Tejedor, recordó que el reparto de beneficios, a partir de 2014, será proporcional a lo que haya aportado cada planta al plan de ahorro.


Asimismo, la dirección europea de General Motors aceptó la propuesta de los sindicatos de crear una sociedad fiduciaria que vele porque los 265 millones de euros que las plantas europeas van a aportar al plan de ahorro hasta 2014 se destinen realmente a la inversión en cinco nuevos productos y que no haya demoras sobre el calendario previsto. En caso de que las hubiera, la empresa tendría que abonar un 5% de intereses, destacó Pedro Bona, secretario general de UGT en Figueruelas. Precisamente algunos de los nuevos productos tienen que desarrollarse en la planta zaragozana, como el nuevo modelo de Combo que tendría que estar en 2014, y el del 'Junior', que debería empezar a hacerse en 2011 para que su fabricación pudiera ser realidad dos años después, si bien la compañía todavía no ha decidido si se hará en la planta zaragozana o en la alemana de Eisenach.

 

Sin tope económico


Bona subrayó que lo más importante del acuerdo firmado ayer por la dirección de GM Europa es que la empresa ha aceptado la participación en el 10% de beneficios, antes de impuestos, por parte de la plantilla durante diez años y sin tope económico, es decir, que la empresa deberá abonarlo siempre que tenga beneficios, sean muchos o pocos. Eso sí, precisó que el preacuerdo firmado ayer habrá que renegociarlo dentro de cinco años y que el Consejo de Administración estadounidense debe darle el visto bueno definitivo. En este sentido, fuentes de la compañía confirmaron el acuerdo sobre el plan de futuro, "aunque sujeto a la aprobación por parte de GM".


En cuanto a la situación de la planta de GM en Amberes, amenazada por el cierre si no encuentra un comprador antes de que acabe el año, Pedro Bona reconoció que ayer les habría gustado salir de la reunión sabiendo que ya había un nombre: "Nos han avanzado que había tres empresas interesadas, dos chinas y una europea, y que seguían negociando". Salvador Salas explicó que la dirección "se mostró bastante hermética" en este tema, aunque esperanzada en que al final alguien compre la planta belga: "Confirmaron que había tres grupos inversores industriales de 'categoría A' interesados y que alguno incluso tenía intención de fabricar coches, pero no dieron más detalles para no entorpecer las negociaciones. Se dieron de plazo hasta mediados de noviembre. Para esa fecha, ha de haber un inversor elegido, ya que el 31 de diciembre de este año es la fecha límite que se ha marcado la compañía para cerrar o vender la planta de Amberes". No obstante, puntualizó Salas, "los sindicatos, sobre todo los belgas, se mostraron más escépticos sobre la posibilidad, más que factible según la dirección, de que que la venta se produzca".


Por último, la dirección de GM Europa apoyó también la pretensión del comité de convertir Opel en una sociedad anónima, lo que permitirá, al amparo de la legislación alemana, alcanzar la cogestión del negocio y que el comité europeo pueda intervenir en decisiones trascendentales para el futuro de la empresa como nuevas inversiones, ratio de amortización, capacidad productiva, etc".