Miles de ganaderos vuelven a la calle para exigir ayudas

Miles de ganaderos convocados por COAG, más de 7.000 según la organización y unos 1.500 según fuentes policiales, se manifestaron ayer en Madrid para exigir al Ministerio de Agricultura que habilite ayudas para afrontar las pérdidas de hasta 2.500 millones de euros que registra el sector por el incremento de los costes de producción y la tendencia a la baja de los precios en origen. Bajo el lema "En defensa de los ganaderos. Por un futuro digno", la protesta partió de la Puerta de Alcalá y concluyó frente al Ministerio de Agricultura, donde se concentraron productores de todas las Comunidades -800 de ellos aragoneses- mientras el secretario general de COAG, Miguel López, se entrevistaba con el director general de Ganadería, Carlos Escribano.

"Ministra, aliméntalos tú"

Ante la sede del Departamento que dirige Elena Espinosa, los manifestantes simularon un pequeño corral con tres ovejas y dos terneras, bajo un cartel en el que se podía leer: "Ministra, aliméntalos tú, que nosotros no podemos".

Miguel López solicitó que se amplíe el marco de negociación iniciado con las organizaciones agrarias para articular medidas económicas, fiscales, de mercado y de control de fronteras, así como acciones legislativas a medio plazo para "atajar por ley el diferencial de precios existentes.

El director general de Ganadería recordó que el pasado 22 de noviembre el Ministerio firmó un principio de acuerdo con las tres organizaciones agrarias para buscar una solución a la situación que atraviesa el sector, fijando unas líneas de trabajo que el Gobierno ha puesto en marcha a una "velocidad muy alta".

Recordó que en 45 días se han desarrollado más del 90% de las medidas acordadas, como las ayudas directas para compensar la pérdida de valor del ovino afectado por la lengua azul, reparto de derechos de ovino y caprino, tres reales decretos con ayudas directas de hasta 7.500 euros por explotación, entre otras.

Además señaló que se mantienen abiertas otras medidas de fiscalidad y reducción de módulos a la seguridad social, así como la aprobación de unos créditos blandos subvencionados para inyectar algo de liquidez a un sector en crisis, además de medidas de mercado para sectores como el porcino.