REDUCCIÓN DE LA DEPENDENCIA ENERGÉTICA

Medvédev saluda al proyecto Nabucco visitando a las fuerzas rusas que ocupan Georgia

Mientras los primeros ministros de Austria, Bulgaria, Hungría, Rumanía y Turquía firmaban en Ankara el acuerdo que da luz verde a la construcción del gaseoducto 'Nabucco', con el que Europa espera reducir la dependencia energética de Rusia, el jefe del Kremlin, Dmitri Medvédev, se daba un baño de multitudes en Tsjinvali, la capital de la secesionista Osetia del Sur, y visitaba el principal cuartel del Ejército ruso desplegado en la zona.


El gigante energético ruso Gazprom, el Gobierno de Vladímir Putin y un gran número de especialistas rusos dudan que 'Nabucco' sea viable. María Belova, portavoz del Instituto de Energía y Finanzas de Moscú, insistió hoy en que "va a haber serias dificultades para encontrar suficiente gas que justifique un proyecto de tales dimensiones". Según ella, "lo primero que va a fallar es la financiación, ya que la UE está dispuesta a gastarse sólo 300 millones de euros, cuando el coste total de la tubería asciende a los 8.000 millones". "Nabucco no amenaza los intereses de Rusia", afirmó Belova ante los micrófonos de la emisora 'Eco de Moscú'.


Pero, por si acaso, Moscú ha querido dejar claro que sigue siendo una potencia que cuenta mucho en el Cáucaso. Tsjinvali, situada a poco más de un centenar de kilómetros de Tiflis, la capital de Georgia, se encuentra también a tiro de piedra del itinerario del actual oleoducto que une Bakú con el puerto turco de Ceyhan y del trazado del futuro gaseoducto 'Nabucco', competencia directa del proyecto ruso "South Stream".


Las televisiones rusas mostraron a Medvédev en compañía del líder separatista surosetio, Eduard Kokoiti, pasando revista al abundante parque de carros y piezas de artillería que las tropas rusas se han llevado a la antigua provincia georgiana. Tras una guerra que duró cinco días contra las tropas georgianas, Rusia ocupó el año pasado Osetia del Sur y Abjasia y las reconoció como estados independientes.


Ahora, según el viceministro ruso de Interior, Arkadi Edélev, la guerrilla chechena se nutre de combatientes que llegan a través de Georgia. "La situación en el Cáucaso Norte (ruso) no se estabilizará mientras dirigentes amorales como Saakashvili continúen en el poder", dijo Edélev el viernes. Los ataques y acciones terroristas de grupos islamistas se han intensificado recientemente en Chechenia, Daguestán e Ingushetia. El pasado 22 de junio, el presidente ingush, Yunus-Bek Evkúrov, fue gravemente herido en un atentado con bomba y sigue hospitalizado en Moscú sin recuperar el habla.


El presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, calificó hoy en Ankara la visita sorpresa de Medvédev a Tsjinvali como la "iniciativa diplomática más amoral y vergonzosa en la historia de la diplomacia rusa". "Provocación" fue el apelativo empleado por el responsable del Departamento para la Reintegración de Georgia, Temur Yakobashvili, quien además consideró irrisorias las promesas de ayuda económica a los osetios anunciadas hoy por Medvédev. Por su parte, David Bakradze, presidente del Parlamento Georgiano, declaró que el líder ruso ha desoído los consejos que hace unos días le dio en Moscú su homólogo estadounidense, Barack Obama, sobre la necesidad de que Rusia "respete la integridad territorial de Georgia".


'Nabucco', que deberá suministrar anualmente a Europa 31.000 millones de metros cúbicos de gas y tendrá una longitud de 3.300 kilómetros, espera recibir suministros de Azerbaiyán, Turkmenistán, Irak, Irán y, según Ankara, también de Rusia, pese a ser su competidor. A la ceremonia de firma del contrato asistieron, junto a los jefes de Gobierno de los cinco países por los que pasará el gaseoducto, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, el primer ministro iraquí, Nuri Al Maliki, Saakashvili, el emisario norteamericano, Richard Morningstar, y otros altos dirigentes de Alemania, Azerbaiyán, Egipto y Siria, además de representantes del Banco Europeo de Inversiones y del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo.