PROCESOS DE INTEGRACIÓN DE LAS CAJAS

Las aragonesas, candidatas en distintos procesos

Ibercaja y CAI aparecen en las quinielas para posibles operaciones con diferentes entidades.

Con muchas 'novias', pero sin acabar de decidirse si se quedan con alguna y con cuál, las cajas aragonesas están en el punto de mira ante el proceso de concentración y fusiones exigido por el Banco de España, pero que hasta ahora se va produciendo con cuentagotas.

Tras la intervención de Cajasur por su negativa a fusionarse con Unicaja, los representantes del Banco de España tienen que decidir aún qué hacer con la entidad cordobesa, si la venden entera o por partes, según publicaba ayer el diario Expansión, que al hilo de la noticia indicaba que "en el sector financiero ya sitúan a Bancaja e Ibercaja en las quinielas de una posible solución".

Por su parte, Caja Inmaculada (CAI) sigue apostando por ir en solitario, aunque sus responsables están sondeando otras posibilidades, como un Sistema Institucional de Protección (SIP) o 'fusión fría' o incluso una fusión completa, pero siempre que la caja aragonesa lidere el proyecto.

Una de las entidades que aparecía como candidata a una integración con la CAI, en el marco de una operación que incluiría a varias cajas catalanas es Caixa Laietana, que tiene su sede en Mataró y cuyos responsables prevén cerrar un acuerdo de forma "inminente", según explicaron a la agencia Europa Press fuentes de la entidad, que indicaron que está acabando de decidirse entre una operación dentro de Cataluña y una fuera de esa comunidad.

Los próximos días -esta semana o la próxima como máximo-, Caixa Laietana prevé hacer el anuncio oficial, pero de momento no han trascendido los detalles sobre las dos opciones. En Cataluña, la caja nunca ha descartado la opción de fusión con Caixa Penedès, pese a que congelaron el proceso en diciembre, y también ha sonado un posible SIP a tres bandas junto con Caixa Girona.