La quejas sobre vivienda lideran las reclamaciones presentadas en 2007

Las quejas sobre vivienda, sobre todo por compraventa, se sitúan a la cabeza de las reclamaciones formuladas por los consumidores durante el pasado año ante la Federación de Usuarios Consumidores Independientes (FUCI). Según esta organización, la vivienda se sitúa "por quinto año consecutivo como el sector más problemático", ya que se recibieron 6.261 reclamaciones sobre este tema, el 12% del total de las quejas.

Casi siete de cada diez reclamaciones de los consumidores tienen que ver con la compraventa de viviendas (4.481), mientras que el resto se refieren a alquileres (1.780). Estas cifras suponen un notable incremento con respecto a 2006, año en el que el número de reclamaciones fue de 5.807 (4.052 de compraventa y 1.775 sobre arrendamiento), según el balance que ha hecho la FUCI de las consultas y reclamaciones recibidas el pasado año. Respecto a las consultas, el pasado año se registraron 33.339, siendo el 69% de éstas relativas a compraventa y el 31% a arrendamiento.

En este caso hay una reducción del número de consultas respecto al anterior año en el que hubo más de 42.000, lo que la organización achaca a la mayor cautela de los consumidores a la hora de hacer un desembolso tan importante como es la compra de una casa.

Sobre las reclamaciones en la compraventa, una cuarta parte se refirieron a deficiencias en la prestación de servicios y cláusulas abusivas, mientras que en operaciones de alquiler, siete de cada diez fueron por los precios y las condiciones abusivas.

En relación con los vicios ocultos, recomienda reclamar al promotor o inmobiliaria en el momento de ser detectados. En casos de retraso en la entrega de llaves, explica que los compradores deben prever en los contratos que firman cláusulas de penalización en casos de incumplimiento, como la compensación por alquileres o cantidades por día de retraso.

La organización de consumidores explica que se pueden denunciar los contratos que contienen cláusulas abusivas una vez firmados, que la memoria de calidades tiene carácter vinculante y que hay pagos que no les corresponde asumir, como por hipotecas que el promotor haya solicitado.