INCERTIDUMBRE EN LOS MERCADOS

Europa se moviliza para evitar el contagio a España

La Eurozona movilizó todas sus armas políticas y dialécticas, en consultas telefónicas y reuniones de emergencia en diferentes capitales, para evitar que España e Italia se conviertan al final en víctimas fatales de la crisis de la deuda.

El panel de la Bolsa de Madrid este martes
La prima de riesgo española supera los 400 puntos
EFE. JOSÉ HUESCA

La Eurozona movilizó todas sus armas políticas y dialécticas, en consultas telefónicas y reuniones de emergencia en diferentes capitales, para evitar que España e Italia se conviertan al final en víctimas fatales de la crisis de la deuda.


El hecho de que el martes la Comisión Europea recalcara su plena confianza en las medidas de ajuste y de reforma de Madrid y de Roma y descartara tajantemente un rescate no evitó que las primas de riesgo española e italiana marcaran, un día más, nuevos máximos.


En la capital española, la prima de riesgo -que mide la diferencia entre el interés de la deuda española y la alemana a diez años- se relajaba ligeramente al final de la tarde al situarse en 377 puntos básicos tras abrir de nuevo en máximos y alcanzar los 407 puntos.


Así el rendimiento que tiene que ofrecer el Estado español para que los inversores se animen a comprar bonos nacionales en lugar de germanos alcanzaba a pocas horas del cierre de la bolsa el 6,20 %.

Italia

En Roma, la prima de riesgo de Italia abrió en un nuevo récord de 390 puntos básicos, siendo el rendimiento del 6,23 %, pero por la tarde bajó a 364 puntos con una rentabilidad del 6,05 %.


El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, quien se encuentra en Portugal, calificó hoy de «claramente injustificado» el acoso de los mercados a España e Italia.

Contactos en todos los niveles

La presión ha hecho que los contactos a todos los niveles se intensificaran en las últimas 24 horas entre las capitales de la Eurozona y las instituciones europeas.

Las llamadas de Zapatero

El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, conversó por teléfono con el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y el ministro italiano de Finanzas, Giulio Tremonti, habló con el comisario europeo de Asuntos Económicos, Olli Rehn, sobre las medidas de contención del contagio y se reunió en Luxemburgo con el presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker.


Mientras el mensaje ha sido el mismo en todas las capitales.

En línea con lo que le pidió Zapatero el martes por teléfono, Barroso afirmó que es «esencial» proceder rápidamente a la implementación de los acuerdos alcanzados el pasado 21 de julio en la cumbre extraordinaria de jefes de Estado y de Gobierno, esencialmente el segundo rescate a Grecia y los nuevos poderes concedidos al Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF).


El fondo de rescate podrá actuar para prevenir crisis, financiar la recapitalización de bancos mediante préstamos a los gobiernos, e intervenir en los mercados secundarios en circunstancias excepcionales y en consulta con el Banco Central Europeo.


El problema es que aún no se han concretado los detalles prácticos en un texto legal que, además, tendrá que ser rubricado por los 17 gobiernos que tienen el euro y aprobado por los parlamentos nacionales antes de poder ser empleado como vehículo financiero para espantar a los especuladores.

Descartadas medidas de contención

Fuentes comunitarias no descartaron medidas de contención alternativas, pero recalcaron que los técnicos de la Comisión Europea están trabajando «día y noche» en el texto sobre la nueva estructura del fondo y que esa es la prioridad.


La semana pasada hubo una conferencia telefónica y el Grupo de Trabajo para Grecia se reúne para seguir avanzando.


Aunque nadie puede adelantar una fecha, Barroso aseguró que el proceso se completará «con urgencia».


Por eso ha escrito hoy a los 17 gobiernos para instarles a asegurar que los parlamentos ratifiquen la reforma del fondo "sin retraso", porque las tensiones en los mercados reflejan una creciente preocupación entre los inversores sobre la capacidad sistémica de la eurozona de responder a la crisis, sostuvo.


También Zapatero y Van Rompuy han coincidido en una conversación telefónica en la necesidad de que el plan de ayuda a Grecia y las medidas para hacer frente a los ataques contra las deudas soberanas se pongan en marcha cuanto antes.