permisos por maternidad

La crisis impide ampliar la baja por maternidad a 20 semanas en la UE

Los ministros de Trabajo rechazan la propuesta principalmente por su coste, unos 1.000 millones en el caso de España.

La crisis económica que azota Europa ha echado por tierra una iniciativa que prometía tener un amplio respaldo social en el marco del "Estado de bienestar": la ampliación de la baja mínima por maternidad de 14 a 20 semanas, con el sueldo completo, más dos de paternidad, en el espacio de la Unión Europea (UE).

En un nuevo golpe a la ampliación del "welfare state" (Estado de bienestar) de cuño europeo, la mayor parte de ministros de Trabajo del bloque optó por rechazar la propuesta en tal sentido que, en octubre pasado, formuló el Parlamento Europeo. El principal argumento, según confirmó ayer el ministro español de Trabajo e Inmigración, Valeriano Gómez, ha sido el peso en las arcas públicas que tendría la medida, en el caso de España, en torno a mil millones de euros, en pleno contexto de crisis. "No cabe duda de que la situación de crisis ha desempeñado un papel importante (en el rechazo a la medida)", que, en principio, sí apoyaba España, aunque con ajustes y matices. "La propuesta legislativa (de ampliar la baja) responde al deseo de los Estados miembros de proteger la maternidad", subrayó Gómez.

La medida, que pretendía ser extraordinariamente generosa teniendo en cuenta la actual recesión, logró -el pasado octubre- salir adelante en el Parlamento Europeo a pesar de la férrea oposición de varios socios comunitarios, abanderados por Alemania. Y es que, puesta sobre la mesa, el aumento de la baja por maternidad de 14 a 20 semanas con el sueldo completo tendrá elevados costos. Estima el Parlamento Europeo que costará a Francia cerca de 1.430 millones de euros anuales. Al Reino Unido le supondrá 1.325 millones y a Alemania 1.150 millones de euros. El coste para España será, según un estudio de expertos para el Parlamento Europeo, de 988 millones de euros al año.

Por siete votos de diferencia

La Comisión Europea propuso una baja por maternidad de 18 semanas, con lo cual la medida -si se hubiera aprobado- supondría un salto positivo para las futuras madres europeas, en momentos de bajos índices de natalidad en el Viejo Continente. Precisamente, como muestra de lo enconado de las posturas es el resultado final que se produjo en la votación en la Eurocámara en octubre: 327 votos a favor, 320 en contra y 30 abstenciones.

También en este asunto, el hemiciclo de Estrasburgo se mostró dividido. Mientras que el Partido Popular Europeo (PPE), el principal de la Eurocámara, apostaba por una solución intermedia, con una baja por maternidad de 18 semanas, el grupo socialista y socialdemócrata, la segunda fuerza en Estrasburgo, presionó para lograr las 20 semanas.

Pero no solo la cámara de Estrasburgo intentó hacer gala de generosidad con las futuras madres. También dio en octubre su visto bueno a la aplicación de una "baja por paternidad" mínima de dos semanas con la totalidad del sueldo del futuro padre. En España la baja por maternidad dura actualmente 16 semanas. También esta iniciativa fue rechazada ayer por la Comisión, pese a su respaldo por el Parlamento.