Las empresas que miran al exterior como la solución a la caída de las ventas que vive el mercado nacional suelen encontrarse con el problema de cómo dar sus primeros pasos en otros mercados. Cámara de Zaragoza forma cada año a 350 profesionales en comercio exterior a través de los cerca de 25 cursos que realiza al año en distintos niveles. Así lo explicó ayer José Miguel Guinda, presidente de la Comisión de Internacionalización de la Cámara, durante las jornadas en las que la institución presentó la «cantera» de profesionales con que cuentan las empresas aragonesas. «Ellos pueden ayudarles a abordar la salida a los mercados internacionales», añadió Guinda.

Por otro lado, el encuentro sirvió para promocionar entre los jóvenes los programas de formación de la Cámara. De ello se encargaron dos de sus participantes. «Te tiene que gustar, saber idiomas y estar dispuesto a salir fuera», explicó Antonio Cantín, 'Area sales manager' para el mercado europeo de la citada Airtex, fabricante de bombas de agua para el sector del automóvil. En su trayectoria ha sido becario del Instituto de Comercio Exterior (ICEX) en Taiwan. En este país estuvo trabajando cinco años como analista de mercado, hasta volver a Zaragoza. Animó a los empresarios a contratar a profesionales porque «hay mucho mercado donde elegir».

Aumentar un 20% las ventas

El coste se reduce acudiendo a programas públicos. Con ellos se consigue poner en contacto a profesionales y empresas. Este fue el caso de Ana Morancho, técnico de exportación de Steel for Bricks formada en Alemania, Inglaterra y Francia. Comenzó trabajando en su empresa actual dentro de un programa de las Cámaras. En plena crisis del ladrillo, la firma de la construcción aumentó un 20% sus ventas y Morancho terminó en plantilla. En un año, ha abierto mercados en Bélgica, Holanda e Italia. «Depende del estadio en que se encuentre una empresa para ver el resultado antes», explicó.