BOLSA

La Bolsa ha perdido en lo que va de año la cuarta parte de su valor

Jornada aciaga en las bolsas. Presionados por la desaceleración económica, las sombrías expectativas del sector bancario y las malas noticias del mercado laboral de Estados Unidos, con la apertura en rojo de Wall Street, los parqués europeos se hundieron este viernes, y los españoles más que ningún otro.

 

El Ibex 35 se vino abajo y marcó un nuevo mínimo anual de 11.139,7 puntos, tras caer el 2,97% en la sesión y un 4,8% en la semana. Quebrada la barrera de los 11.200 puntos, y con una pérdida acumulada superior al 26% desde enero, los expertos ya se plantean un nuevo suelo.


La oleada de ventas arrasó Europa. La Bolsa de París terminó con retroceso del 2,49%, Londres perdió el 2,26% y el índice de Fráncfort un 2,42%.


La compra de Energy East


La mayor caída de los valores del Ibex 35 la registró Iberdrola, que cedió el 6%. Los inversores se desprendieron de acciones de la eléctrica, que tiene el visto buenos para comprar Energy East en Estados Unidos, porque su mayor dimensión aleja la posibilidad de que se convierta en objeto de OPA. También tomaron en cuenta que la francesa EDG -que se declaró interesada por Iberdrola- ahora está volcada en hacerse con British Energy.


Las únicas subidas destacadas, las de Endesa en un 4,27% y de Acciona en un 2,27%, responden a la posibilidad de la constructora y su socio Enel rompan la alianza que mantienen y el grupo energético italiano se haga finalmente con el 25% que ahora posee Acciona en la eléctrica española.


Todos los bancos cerraron en rojo. Popular cedió otro 4,67%, Bankinter el 3,87%, BBVA el 2,96%, Banesto y Santander el 2,8%. El descenso del precio del crudo llevó a la petrolera Repsol YPF a perder el 4,32%, mientras los títulos de Gas Natural cayeron el 5%.


La sesión ya había arrancado con mal pie, con los bancos sensiblemente tocados por las repercusiones de los mensajes del Banco Central Europeo. Las entidades financieras españolas se verán perjudicadas por la debilidad de la economía, que ya está recortando su negocio y les obligará a realizar mayores provisiones. También el endurecimiento de las exigencias para obtener recursos en las subastas convocadas por la autoridad monetaria puede ocasionarles dificultades, si en los mercados del dinero persiste la sequía que ya se prolonga desde hace más de un año.


La avalancha de ventas de las primeras horas se acrecentó cuando llegaron noticias negativas del otro lado del Atlántico. La economía de Estados Unidos tiene estas contradicciones. Tras el avance del producto interior bruto en un 3,3% en el segundo trimestre, el desempleo subió en agosto a su nivel más alto en cinco años.


Depreciación del euro



Estados Unidos lanzó a comienzo del año un plan de reactivación por 120.000 millones de euros en dos años para hacer frente a la desaceleración económica originada en la crisis inmobiliaria. Pero la Casa Blanca consideró ayer que el incremento del desempleo en Estados Unidos es "insatisfactorio" pero descartó la necesidad de un segundo plan de reactivación por el momento.


Pese a la negativa evolución del mercado laboral norteamericano, el deprimido clima económico europeo prestó nuevas alas al dólar. En los mercados de divisas, el euro llegó a cotizar por debajo de 1,42 dólares, su nivel más bajo en once meses, desde octubre de 2007.