BANCA

La banca y las cajas españolas mantienen un alto grado de solvencia

A diferencia de lo sucedido en otros países, en el caso español no se han creado vehículos estructurados para financiar inversiones a largo plazo en activos de titulización mediante la emisión de títulos a corto plazo.

Un estudio del Banco de España destacó el alto grado de solvencia de las entidades financieras nacionales (banca y cajas de ahorro) y las reducidas tasas de morosidad de las hipotecas.


El informe sobre la evolución de los mercados primarios de valores en España durante la década actual, de Víctor García-Vaquero y José Manuel Marqués, de la Dirección General del Servicio de Estudios, aparece publicado en el boletín económico del Banco de España.


Los autores destacan que, a diferencia de lo sucedido en otros países, en el caso español no se han creado vehículos estructurados para financiar inversiones a largo plazo en activos de titulización mediante la emisión de títulos a corto plazo.


El artículo destaca la creciente colocación de cédulas hipotecarias por parte de las instituciones financieras, de modo que su saldo vivo ha mantenido un peso significativo en el conjunto de los títulos de deuda del sector privado, por encima del 16% en 2007.


Otra partida que también ha mostrado una marcada tendencia creciente ha sido la de las emisiones de titulización, cuyo ritmo de avance anual en el período 2000-2007 se ha situado en el entorno del 55%.


De este modo, el saldo vivo de estos instrumentos representaba en diciembre del pasado año algo más del 38% del total de los títulos de renta fija emitidos por el sector privado, predominando aquellos cuyo activo subyacente son préstamos vinculados al mercado hipotecario.


Las titulizaciones españolas, a diferencia de las realizadas en otros países, no han conllevado una transferencia significativa del riesgo hacia los inversores.


Por este motivo, las entidades que han concedido los préstamos han mantenido los incentivos adecuados para no relajar su política de concesión de créditos, preservando de esta manera la calidad de su cartera crediticia.


El episodio de turbulencias financieras iniciado el pasado verano a raíz del incremento de la morosidad de las hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos ha condicionado la evolución de las emisiones de valores en el último tramo del pasado ejercicio y en el inicio del actual.


No obstante, según el Banco de España, todavía es pronto para calibrar el verdadero alcance y duración de estas perturbaciones y para conocer en qué medida afectarán al desarrollo de los distintos mercados primarios de títulos.